Es bueno aprovechar el verano para responder a las críticas sobre las que no vale la pena meditar cuando azota el trabajo, las buenas ideas y el buen gusto. Tengo algunas a las que no he hecho caso nunca y que hasta me han dado cierta pena, porque costaba poco cantarles amorosamente las cuatro verdades que deshacen sus críticas supuestas. La primera que me viene a la cabeza es aquella de los que dividen el mercado del conocimiento en científicos y no científicos
Comentarios
Qué tipo más grande Punset.