Hollar hoy la montaña más alta del planeta es cuestión de dinero. El camino desde Lukla es una autopista de tierra con cibercafés y teterías, el campamento base un poblacho lleno de basura y botellas de oxígeno, y el recorrido a la cumbre un colapsado desfile de buscadores de fama. El hombre que más veces ha hecho cima, la mujer que ha subido y bajado más rápido o el primer ciego (o tuerto) mayor de 65 años en hacer cumbre. El Everest se ha convertido en un circo. Y un circo necesitas payasos. En esas llegó Jesús Calleja…
Comentarios
Follar hoy en la montaña más alta del planeta es cuestión de dinero.
Solo escribo lo que ha leído todo el mundo, y no entro en lo de las teterías.