Dale la vuelta a alguna hoja en un bosque de Tailandia y podrías descubrir la tumba de una hormiga zombi. Las mentes de estos pobres insectos fueron conquistadas por un hongo parásito conocido por
Ophiocordyceps unilateralis que obliga a las hormigas arborícolas (
Camponotus leonardi) a descender cerca del suelo en busca de una hoja joven de la que poder alimentarse. Vía
www.journals.uchicago.edu/doi/abs/10.1086/603640?prevSearch=Ophiocordy [EN]