Las investigadoras Carmen Branje y María Karam del Centro para el Aprendizaje de la Tecnología de Toronto (Canadá) han creado un prototipo de silla denominado "Emotichair", equipada con altavoces que emiten sonidos y vibraciones a diferentes frecuencias que ayudarían a personas sordas sentir la música, por ejemplo de las secuencias de una película. El prototipo, que ha costado 500.000 dólares y cuatro años de trabajo, ha sido presentado en una conferencia científica sobre interacción entre humanos y computadoras celebrada en Atlanta (EEUU).
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