¿Os habéis fijado en la cara de estreñidos que comparten un integrista islámico, un radical nacionalista, un sicario de la corrección política, una feminista extrema, por poner algunos ejemplos? ¿Y qué la gente que vive y deja vivir ríe con frescura y profundidad? Los humildes, los pobres, los perdedores poseen un alma más limpia que los que necesitan dominarlo todo e imponen a los demás sus estériles e infértiles posiciones. La verdadera sabiduría produce convicciones sencillas, con raíces profundas que no necesitan ser impuestas.
Comentarios
Menuda entradilla,...
Defender el sentido común sobre los totalitarismos morales no es algo malo, que es lo que se defiende en este artículo. De hecho es una actitud que merece ser votada en positivo. Bien por Quino, que grande eres!