Actualmente la transexualidad se considera un “trastorno de identidad sexual”, patología mental clasificada en el CIE-10 y en el DSM-IV-R. Estas clasificaciones son las que guían a los y las psiquiatras de todo el mundo a la hora de establecer sus diagnósticos. En ellas se comete un error poco casual: la confusión de los efectos de la transfobia con los de la transexualidad. Se invisibiliza la violencia social que se ejerce sobre quienes no se adecuan a las normas de género. Asi, se ignora activamente que el problema no es la identidad...
Comentarios
Ya está bien de considerar trastornos las opciones sexuales que practican las demás personas, que no todas las personas somos iguales ni en el siglo XXI ni lo seremos en el futuro y es hora de ir cambiando conceptos del pasado...
Géneros neutros con asteriscos. No voy a seguir leyendo.