Francia dispone, como EEUU y su sistema PRISM, de un sistema de espionaje a gran escala de las telecomunicaciones. Le Monde puede demostrar que la Dirección General de la Seguridad Exterior (DGSE, los servicios especiales) capta sistemáticamente los datos y señales emitidos por ordenadores o teléfonos en Francia, así como entre Francia y el extranjero. Via http://gigaom.com/2013/07/04/france-has-its-own-prism-like-surveillance-program-report-suggests/
Francia dispone, como EEUU y su sistema PRISM, de un sistema de espionaje a gran escala de las telecomunicaciones. Le Monde puede demostrar que la Dirección General de la Seguridad Exterior (DGSE, los servicios especiales) capta sistemáticamente los datos y señales emitidos por ordenadores o teléfonos en Francia, así como entre Francia y el extranjero: todas las comunicaciones son espiadas. Los políticos lo saben, pero el secreto es la norma: este Gran Hermano es ilegal. Escapa a todo control.
Lo que buscan los servicios de inteligencia son los "metadatos", no el contenido del mensaje, sino su contenedor. El objetivo es saber quién está hablando con quién para establecer vínculos entre los objetivos, identificar las "células". La DGSE registra también los registros telefónicos de millones de suscriptores, correo electrónico, SMS, fax ... Y toda la actividad de Internet, lo que supone Google, Facebook, Microsoft, Apple, Yahoo ... El dispositivo es valioso en la lucha contra el terrorismo. Pero permite espiar a cualquier persona, en cualquier momento.
Autorización virtual
La DGSE capta miles de millones de datos, comprimidos y almacenados en París, en tres niveles en el sótano de la sede de la DGSE, en Boulevard Mortier. El servicio de inteligencia tiene un superordenador capaz de manejar decenas de millones de gigabytes.
Otros servicios de inteligencia franceses tienen acceso a la base de datos, llamado simplemente "la infraestructura de compartición." Parte de la información se puede utilizar incluso por la policía con el pretexto de "información anónima".
El dispositivo, sin embargo, es completamente ilegal - "a-legal", corrige uno de los jefes de las agencias de inteligencia. "El sistema legal prohíbe a la interceptación de seguridad implementada por los servicios de inteligencia de tener algo como PRISM", dice la Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL).
La ley no contiene disposiciones para el almacenamiento masivo de datos técnicos de los servicios secretos. "Durante años, nosotros hemos estado en la autorización virtual", dice uno de los antiguos propietarios de los servicios. "Y cada organismo es feliz." Una parlamentaria confirma "que gran parte de las conexiones electrónicas en Francia es en realidad interceptada y almacenada por la DGSE."
Pero oficialmente, "la infraestructura de compartición " no existe.
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Nota: no tengo claro como traducir "l'infrastructure de mutualisation", así que lo he dejado como proponía Google Translator.
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Traducción:
Francia dispone, como EEUU y su sistema PRISM, de un sistema de espionaje a gran escala de las telecomunicaciones. Le Monde puede demostrar que la Dirección General de la Seguridad Exterior (DGSE, los servicios especiales) capta sistemáticamente los datos y señales emitidos por ordenadores o teléfonos en Francia, así como entre Francia y el extranjero: todas las comunicaciones son espiadas. Los políticos lo saben, pero el secreto es la norma: este Gran Hermano es ilegal. Escapa a todo control.
Lo que buscan los servicios de inteligencia son los "metadatos", no el contenido del mensaje, sino su contenedor. El objetivo es saber quién está hablando con quién para establecer vínculos entre los objetivos, identificar las "células". La DGSE registra también los registros telefónicos de millones de suscriptores, correo electrónico, SMS, fax ... Y toda la actividad de Internet, lo que supone Google, Facebook, Microsoft, Apple, Yahoo ... El dispositivo es valioso en la lucha contra el terrorismo. Pero permite espiar a cualquier persona, en cualquier momento.
Autorización virtual
La DGSE capta miles de millones de datos, comprimidos y almacenados en París, en tres niveles en el sótano de la sede de la DGSE, en Boulevard Mortier. El servicio de inteligencia tiene un superordenador capaz de manejar decenas de millones de gigabytes.
Otros servicios de inteligencia franceses tienen acceso a la base de datos, llamado simplemente "la infraestructura de compartición." Parte de la información se puede utilizar incluso por la policía con el pretexto de "información anónima".
El dispositivo, sin embargo, es completamente ilegal - "a-legal", corrige uno de los jefes de las agencias de inteligencia. "El sistema legal prohíbe a la interceptación de seguridad implementada por los servicios de inteligencia de tener algo como PRISM", dice la Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL).
Sigue de #1 (he excedido el tiempo de edición):
La ley no contiene disposiciones para el almacenamiento masivo de datos técnicos de los servicios secretos. "Durante años, nosotros hemos estado en la autorización virtual", dice uno de los antiguos propietarios de los servicios. "Y cada organismo es feliz." Una parlamentaria confirma "que gran parte de las conexiones electrónicas en Francia es en realidad interceptada y almacenada por la DGSE."
Pero oficialmente, "la infraestructura de compartición " no existe.
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Nota: no tengo claro como traducir "l'infrastructure de mutualisation", así que lo he dejado como proponía Google Translator.