Hace 11 años | Por swappen a historiasdelahistoria.com
Publicado hace 11 años por swappen a historiasdelahistoria.com

Nuestro archienemigo de hoy no fue un gran caudillo militar, o un héroe admirado y loado, fue un joven guerrero, un elemento más dentro de la feroz resistencia que una sola ciudad opuso a la máquina militar mejor engrasada del mundo antiguo: Numancia. Sirva este artículo como homenaje no solo al joven Retógenes, sino a los dos mil quinientos numantinos que, todos a una como la posterior Fuenteovejuna, no dieron su brazo a torcer ante el invasor romano.