Los primeros cristianos eran unos tipos que a pesar de todo vivían felices, lo tenían todo en común, y esa felicidad y ese compartir era lo que gustaba a sus coetáneos. Hoy los cristianos son un grupo heterogéneo, con personas individuales muy abnegadas y respetables, pero los que mandan están a partir un piñón con los que con más ahinco defienden el sistema capitalista en todo el mundo. Lo contrario del compartir ¿No creen? Ahora no hay oferta de felicidad, sino amenaza de no recibir la comunión.
|
etiquetas: conferencia episcopal , camino , manifestaciones , reflexiones