El tiempo de nuestra percepción está atrasado medio segundo respecto al tiempo real de los acontecimientos. La decisión necesita un segundo. El presente sólo dura tres segundos. No hay conciencia sin tiempo. Así lo explica el neurólogo de California Benjamín Libet en su nuevo libro “Mind Time: The Temporal Factor in Consciousness”.
|
etiquetas: presente , cerebro , amígdala , neocorteza