Hace 12 años | Por JefeBromden a hablandodeciencia.com
Publicado hace 12 años por JefeBromden a hablandodeciencia.com

Cualquiera que tenga una mascota se habrá percatado de que los animales, al igual que los humanos, tienen personalidades diferentes: se ve claramente en el día a día. Pero imagínate que quieres cuantificar y clasificar objetivamente eso que atribuyes como personalidad, ahí se complican la cosas.

Comentarios

D

El artículo es muy interesante, pero no entiendo la conclusión. Lo que descubrieron los etólogos fue que:
"las hembras más exploradoras seleccionaban también a machos que parecía que exploraban, y las menos exploradores no tenían preferencias particulares"

pero la explicación que da el autor es:

"Todo esto tiene un sentido en la naturaleza, ya que la personalidad agresiva y exploradora de un macho le daría indicaciones a la hembra de cómo ese macho va a ser capaz de buscar alimento y defender el nido, antes de “arriesgarse” a tener progenie con él"

Lo cual sería perfecto, creo, si todas las hembras escogiesen machos más exploradores, pero no, solo lo hacen aquellas hembras que son ellas mismas más exploradoras. Sin ser en absoluto experta en estos temas, si me equivoco que alguien me lo explique.