Hace 14 años | Por Feindesland a nofunciona.es
Publicado hace 14 años por Feindesland a nofunciona.es

Por lo visto, la cosa es correr hacia adelante con entusiasmo, como el caballo que arrastra un pesado carro cuesta abajo, y cree que mueve el carro, cuando es el carro el que lo mueve a él, porque al caballo le faltan fuerzas para detenerse en esa pendiente.