Hace 5 años | Por doctoragridulce a blogs.publico.es
Publicado hace 5 años por doctoragridulce a blogs.publico.es

La única vez en mi vida que vi a mi padre, Javier Pradera, a punto de retorcerle el pescuezo a alguien fue en la primavera de 1978, tras un almuerzo con Jesús Aguirre al que tuve la desgracia de asistir. No fueron impresiones mías, él mismo me lo confesó al salir de aquella tensa comida en la cafetería–restaurante Bruselas de Madrid, sobre la que ahora me explayaré: –Me he tenido que contener para no arrearle una hostia. ¡Qué hijo de puta!

Comentarios

D

No tengo ningún interés en defender a alguien cuyo principal mérito fué dar uno de los mayores braguetazos que se pueden dar en España.

Pero juraría yo que este artículo, 17 años, después de la muerte del interfecto, aporta más bien poco. Si aún relatase algo que explique qué y porqué pasó algo en la historia de España, bueno. Pero decir ahora símplemente que este trepa era un HdLGP (lo que no niego), pues...

marcamo

La hija de la Duquesa puso a parir a su padrastro en la tele el otro día.

Pero, coincido con #1 en que es un poco tarde ya...

mono

No sabía que Máximo Pradera se dedicaba a la prensa rosa. Ya veo que además con mala leche.

Para mi muy irrelevante