Todos sabemos, más o menos, que significa hacerse el longuis o hacerse el longui. Ambas son expresiones aplicables al que se hace el inocente o distraído, al que se desentiende de algún asunto o disimula. Incluso, si tomamos sus raíces calas, longui significa inocente, tonto o alelado. Esta historia es una de esas ocasiones y nuestro protagonista, es decir aquel que se “hace el longuis”, no es otro que Juan Rufo.
Comentarios
La página tiene el texto en blanco sobre fondo negro, así que me he hecho el longuis y he pasado de leerlo.