Solo 25 individuos, directores de enormes empresas, se distribuyeron en diez años 14.000 millones de dólares, aproximadamente el PNB de Camerún o Costa de Marfil. Dicen que es porque su gestión crea riqueza para sus accionistas, pero ¿es cierto? El Wall Street Journal ha hecho un estudio al respecto, cuyos resultados se analizan en este artículo. Traducción en comentario 1
LAS MEGAREMUNERACIONES DE LOS JEFES DE EMPRESA AMERICANOS: ORACLE Y APPLE
El Wall Street Journal ha hecho un estudio de las remuneraciones percibidas en los diez últimos años por los jefes de empresa americanos. Es una lección que permitirá poner de nuevo los relojes en hora. Como ya he escrito en este blog, toda correlación entre remuneraciones y desempeños en bolsa de las empresas es puramente aleatoria. La lista de 25 nombres es edificante:
-Las quiebras: mil millones de dólares se entregaron a directivos cuyas empresas quebraron. Dick Fuld y Angelo Mozzillo, de Lehman Brothers y Countrywide respectivamente.
-El único “petrolero” es el jefe de Occidental Petroleum, Ray Irani, que se embolsó 857 millones de dólares. Los merece ampliamente: su acción ha aumentado 700%, mientras que la de Exxon vegetaba.
-En productos de consumo, Colgate y Starbucks pagaron 700 millones a sus dos CEOs, mientras que la acción apenas subía.
-El patrón de United Healthcare, un seguro de salud, se atrevió a percibir 450 millones por haber presionado a sus asegurados subiendo las tarifas un 20% en el 2010. Se entiende la cólera de Barack Obama contra lo que hay que llamar “el precio de la sangre”.
-El inefable Barry Diller, el “artista” bien conocido por los accionistas de Vivendi, se lleva la segunda plaza con 1143 millones por una acción que ha perdido la mitad de su valor. La capitalización en bolsa de la empresa de este genio de las finanzas es de apenas 2600 millones.
¿Quien hubiese podido imaginar que NVR, la empresa que construye y financia viviendas, vería su camino en bolsa subir casi un 1000% en diez años? Su jefe parece muy modesto con sus 450 millones.
El sector más interesante al que me quiero referir es el de la tecnología. Rey de los resultados, de los empresarios y de la innovación, la tecnología ofrece un contraste interesante. En diez años Michael Dell ha ofrecido un resultado negativo del 74% por unos modestos 450 millones.
Pero la palma de la vergüenza se la lleva Oracle, y su consejo de administración conocido por su complacencia a los deseos de “Larry”. Otorgó a Lawrence Ellison 835 millones de dólares por una bajada del 35% en diez años. Hay que decir que su participación en Oracle es de 29000 millones. Nunca se está tan bien servido como cuando se sirve uno mismo.
Por fortuna, Steve Jobs retoma el prestigio del sector. Si se ha embolsado 750 millones, al menos la acción de Apple ha subido un 890%. Ha hecho ganar a sus accionistas 200000 millones.
Pero el escándalo está más allá de estos casos individuales. 25 individuos se distribuyeron 14.000 millones de dólares, algo menos que el PNB de Costa de Marfil o Camerún. Colectivamente, no han creado valor en diez años. Los consejos de administración han dimitido de sus responsabilidades. La invocada conexión entre creación de valor y las remuneraciones de los directivos es aleatoria. Solo 5 de las 25 empresas involucradas en estos sueldos extravagantes han superado la media del Dow Jones.
Es hora de revisar los parámetros de estas remuneraciones con el fin de que se correlacionen con el retorno a los accionistas y al funcionamiento de la empresa.
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LAS MEGAREMUNERACIONES DE LOS JEFES DE EMPRESA AMERICANOS: ORACLE Y APPLE
El Wall Street Journal ha hecho un estudio de las remuneraciones percibidas en los diez últimos años por los jefes de empresa americanos. Es una lección que permitirá poner de nuevo los relojes en hora. Como ya he escrito en este blog, toda correlación entre remuneraciones y desempeños en bolsa de las empresas es puramente aleatoria. La lista de 25 nombres es edificante:
-Las quiebras: mil millones de dólares se entregaron a directivos cuyas empresas quebraron. Dick Fuld y Angelo Mozzillo, de Lehman Brothers y Countrywide respectivamente.
-El único “petrolero” es el jefe de Occidental Petroleum, Ray Irani, que se embolsó 857 millones de dólares. Los merece ampliamente: su acción ha aumentado 700%, mientras que la de Exxon vegetaba.
-En productos de consumo, Colgate y Starbucks pagaron 700 millones a sus dos CEOs, mientras que la acción apenas subía.
-El patrón de United Healthcare, un seguro de salud, se atrevió a percibir 450 millones por haber presionado a sus asegurados subiendo las tarifas un 20% en el 2010. Se entiende la cólera de Barack Obama contra lo que hay que llamar “el precio de la sangre”.
-El inefable Barry Diller, el “artista” bien conocido por los accionistas de Vivendi, se lleva la segunda plaza con 1143 millones por una acción que ha perdido la mitad de su valor. La capitalización en bolsa de la empresa de este genio de las finanzas es de apenas 2600 millones.
¿Quien hubiese podido imaginar que NVR, la empresa que construye y financia viviendas, vería su camino en bolsa subir casi un 1000% en diez años? Su jefe parece muy modesto con sus 450 millones.
El sector más interesante al que me quiero referir es el de la tecnología. Rey de los resultados, de los empresarios y de la innovación, la tecnología ofrece un contraste interesante. En diez años Michael Dell ha ofrecido un resultado negativo del 74% por unos modestos 450 millones.
Pero la palma de la vergüenza se la lleva Oracle, y su consejo de administración conocido por su complacencia a los deseos de “Larry”. Otorgó a Lawrence Ellison 835 millones de dólares por una bajada del 35% en diez años. Hay que decir que su participación en Oracle es de 29000 millones. Nunca se está tan bien servido como cuando se sirve uno mismo.
Por fortuna, Steve Jobs retoma el prestigio del sector. Si se ha embolsado 750 millones, al menos la acción de Apple ha subido un 890%. Ha hecho ganar a sus accionistas 200000 millones.
Pero el escándalo está más allá de estos casos individuales. 25 individuos se distribuyeron 14.000 millones de dólares, algo menos que el PNB de Costa de Marfil o Camerún. Colectivamente, no han creado valor en diez años. Los consejos de administración han dimitido de sus responsabilidades. La invocada conexión entre creación de valor y las remuneraciones de los directivos es aleatoria. Solo 5 de las 25 empresas involucradas en estos sueldos extravagantes han superado la media del Dow Jones.
Es hora de revisar los parámetros de estas remuneraciones con el fin de que se correlacionen con el retorno a los accionistas y al funcionamiento de la empresa.
edito.no digo nada