Hace 11 años | Por Fingolfin a politikon.es
Publicado hace 11 años por Fingolfin a politikon.es

En España siempre tenemos un mismo problema dentro de nuestro sistema autonómico: nadie sabe realmente qué impuestos uno puede recaudar. La polémica del euro por receta estas últimas semanas es un ejemplo clásico; aunque las autonomías tienen la sanidad transferida desde hace años, el gobierno central se niega a permitir que nadie cree una tasa que grave la utilización de ese servicio, por mucho que ya no lo gestionen. El absurdo, por supuesto, va más allá de la mera atribución competencial.

Comentarios

D

Voy a ganarme unos negativos por decir la verdad. 1) España es federal de hecho y 2) el federalismo es muy asimétrico:

http://es.wikipedia.org/wiki/Concierto_econ%C3%B3mico

Fingolfin

#5 Tú conoces la historia de Cataluña única y exclusivamente a través de los programas de partidos políticos. Y dado que no eres capaz de salir de ahí, te recomiendo no perder el tiempo leyendo otras cosas, no lo aprovecharás.

D



las Comunidades Autónomas deberían ser capaces de decidir cómo pagan sus facturas libremente. Si quieren coser sus residentes a impuestos, deben poder hacerlo.


Tócate los cojones. Luego:

Alemania tiene un sistema excepcionalmente aburrido con Berlín recaudando casi todo- aunque su sistema de reparto es bastante más eficaz y predecible que el nuestro.


Vaya. Chico, te lo juro: prefiero el sistema alemán.

fentdaci

El federalismo bien planteado puede ser un sistema adecuado de descentralización del poder (¡y de la economía!) para la España castellana, una vez se separen de ella el resto de naciones. Hay buenos ejemplos de ello a lo largo y ancho del mundo. De hecho, la España de las autonomías es EL ANTIEJEMPLO, en mayúsculas, de lo que debería ser una descentralización, porque se ha descentralizado solo la operativa, sin ceder ni un ápice de poder de decisión, a diferencia de lo que pasa en los estados realmente federales, cómo EE.UU., Alemania o Brasil, donde no se ha sacrificado el progreso en aras de hacer coincidir el mapa del poder econóimico con el mapa del poder político. Afortunadamente la dinámica de la historia es relativamente lenta y la inercia positiva de Catalunya en cuanto a potencia industrial venía de muy antiguo, hecho que le ha permitido llegar a nuestras fechas con un tejido empresarial enfermo pero resistente, desfasado pero con capacidad de adaptación, desconcertado pero esperanzado.

Para los frívolos y los caprichosos, empero, que piensan que el federalismo es una pócima mágica que pueda hacer olvidar a los catalanes siglos de gobiernos indisimuladamente contrarios al desarrollo económico de Catalunya y de franco desprecio a su singularidad como nación, les recomiendo que lo guarden en el cajón de las utopías.

Fingolfin

#2 La ignorancia supina sobre la historia de Cataluña está bien para contarla a los imputados del partido en las convenciones, pero por aquí rechina un poco.

fentdaci

#4 , habla por ti, yo soy miembro de la Societat Catalana d'Estudis Històrics, filial de l'IEC y lector entusiasta de Vicens Vives, Soldevila, Ferrer i Roca, Ainaud de Lasarte, Ferrer i Mallol...tú conoces nuestra historia a través de la wikipedia castellana.

He ahí la diferencia, ignorante ciclópeo.