Hace 4 años | Por kikox1 a amnesty.org
Publicado hace 4 años por kikox1 a amnesty.org

Muchos uigures con familiares recluidos en campos políticos en Sinkiang (China) tienen demasiado miedo para hablar públicamente. Ver a un ser querido erróneamente detenido es un doloroso suplicio. Pero no saber dónde está recluido, ni si está vivo siquiera, es aún peor El gobierno chino prefiere denominarlos, eufemísticamente, “centros de transformación mediante la educación”. Asegura que las personas recluidas en ellos reciben “formación profesional” que les ayuda a combatir sus “ideas radicales”.

Comentarios

R

Que miren en Siria, igual han dejado de enviar cartas y dinero por algún motivo.

TocTocToc

Cuando un iogurt desaparece es que alguien ha ido a la nevera y se lo ha comido .

box3d

China "manteniendo la Paz" en sus territorios. Sorprendentemente efectivo a pesar de ser inmoral y genocida.

D

Amnistía Internacional = Propaganda de Boris Johnson.