#2#3 No sea que algún monolingüe castellano tropiece con una palabra que no esté en el diccionario de la RAE y le dé una crisis de ansiedad. Hay que avisar!!!!
El expresidente del Gobierno balear Cristòfol Soler esperaba ver algún cambio de rumbo en la política del Partido Popular de José Ramón Bauzá. No lo ha visto, ni tampoco ha detectado que alguien dentro del partido se moviera ni un centímetro de unas políticas que él entiende que atacan valores esenciales que el PP de antes tenía claros y asumidos. Y Soler ha decidido irse. Ya no quiere ser de este PP de Bauzá.
Soler tiene previsto entregar mañana lunes al alcalde de Inca y presidente de la agrupación local del PP en la capital del Raiguer, Rafael Torres, la carta con la que se da de baja como miembro del PP.
País, lengua y cultura
Quizás la renuncia de Soler-que era público y notorio que no comulgaba con las políticas y formas de Bauzá- no es una gran sorpresa, pero sí es la certificación de que el rumbo del PP que preside José Ramón Bauzá avanza por un camino que nada tiene que ver con el PP de los primeros años de autonomía de las Islas.
Para Soler, temas como la identidad de país, la cultura y la lengua propias de las Islas Baleares han sido atacados o tratados con una absoluta falta de sensibilidad por la actual dirección del PP balear.
Quien fue breve presidente del Govern asegura que ha intentado ser paciente, esperar a ver algún cambio, pero sin embargo ha llegado al convencimiento de que nada cambiará respecto de estos temas en el PP que dirige Bauzá.
Además, Soler hace un diagnóstico de un PP balear en el que nadie se mueve ni cuestiona o presenta alternativas a estas cuestiones. Así las cosas, considera que ha llegado el momento de partir. La dirección actual, se repite Cristòfol Soler para reafirmar que la decisión de irse es la correcta, "ha dañado" cosas por las que él ha luchado durante muchos años.
Las discrepancias -apunta Cristóbal Soler- con la actual dirección del PP balear "son insalvables", porque se atacan cuestiones que el PP siempre había respetado y compartido.
El momento elegido por Soler para abandonar el partido en representación del cual fue presidente de la Comunidad entre 1995 y 1996 no es tampoco casual. Se acercan las elecciones autonómicas y locales y Soler ve imposible dar la cara por este PP. De hecho, Soler rechazó recientemente una oferta para ir en las listas de Inca, municipio en el que él es militante.
Difícilmente -se dice Soler- uno puede hacer campaña por un partido que lleva adelante actuaciones que atentan contra los valores esenciales de la indentidad del pueblo por los que él ha luchado.
Ley de normatilizació
Hay que recordar que Cristóbal Soler vio nacer la autonomía y participó en el desarrollo de los pilares legislativos de Baleares, como fue en 1986 la Ley de normalización lingüística. Siempre ha recordado la voluntad de consenso de aquellos años y no se ha cansado de repetir en los últimos tiempos que de ningún modo entiende cómo un ejecutivo tiene como objetivo reducir la presencia de la lengua propia en la enseñanza y la función pública.
Era imposible continuar. Soler no quiere ser cómplice de estas políticas y se dice a sí mismo en voz alta que si se mantiene en el partido realmente lo estaría siendo. Es como el dicho aquella de "quien calla otorga". Y Soler no lo quiere hacer.
Mañana lunes Soler ya no será del PP. Deja el partido y se piensa embarcar en los movimientos sociales.
Comentarios
#3 Ley de Skitt: Toda publicación que corrija un error hecho en una publicación de otro usuario, contendrá a su vez al menos un error.
#0 Las entreadillas en castellano, por fovor, que muchos no entendemos euskera.
O al menos cambia ese "formalitza"
#2 Ups, se me ha escapado esa "t". Gracias por el apunte. Quizás algún@admin lo pueda corregir.
(Por otro lado, espero que no te sea necesario consultar el diccionario cantonés-cristiano para descifrar el significado )
por fovor
#2 #3 No sea que algún monolingüe castellano tropiece con una palabra que no esté en el diccionario de la RAE y le dé una crisis de ansiedad. Hay que avisar!!!!
Traducción:
El expresidente del Gobierno balear Cristòfol Soler esperaba ver algún cambio de rumbo en la política del Partido Popular de José Ramón Bauzá. No lo ha visto, ni tampoco ha detectado que alguien dentro del partido se moviera ni un centímetro de unas políticas que él entiende que atacan valores esenciales que el PP de antes tenía claros y asumidos. Y Soler ha decidido irse. Ya no quiere ser de este PP de Bauzá.
Soler tiene previsto entregar mañana lunes al alcalde de Inca y presidente de la agrupación local del PP en la capital del Raiguer, Rafael Torres, la carta con la que se da de baja como miembro del PP.
País, lengua y cultura
Quizás la renuncia de Soler-que era público y notorio que no comulgaba con las políticas y formas de Bauzá- no es una gran sorpresa, pero sí es la certificación de que el rumbo del PP que preside José Ramón Bauzá avanza por un camino que nada tiene que ver con el PP de los primeros años de autonomía de las Islas.
Para Soler, temas como la identidad de país, la cultura y la lengua propias de las Islas Baleares han sido atacados o tratados con una absoluta falta de sensibilidad por la actual dirección del PP balear.
Quien fue breve presidente del Govern asegura que ha intentado ser paciente, esperar a ver algún cambio, pero sin embargo ha llegado al convencimiento de que nada cambiará respecto de estos temas en el PP que dirige Bauzá.
Además, Soler hace un diagnóstico de un PP balear en el que nadie se mueve ni cuestiona o presenta alternativas a estas cuestiones. Así las cosas, considera que ha llegado el momento de partir. La dirección actual, se repite Cristòfol Soler para reafirmar que la decisión de irse es la correcta, "ha dañado" cosas por las que él ha luchado durante muchos años.
Las discrepancias -apunta Cristóbal Soler- con la actual dirección del PP balear "son insalvables", porque se atacan cuestiones que el PP siempre había respetado y compartido.
El momento elegido por Soler para abandonar el partido en representación del cual fue presidente de la Comunidad entre 1995 y 1996 no es tampoco casual. Se acercan las elecciones autonómicas y locales y Soler ve imposible dar la cara por este PP. De hecho, Soler rechazó recientemente una oferta para ir en las listas de Inca, municipio en el que él es militante.
Difícilmente -se dice Soler- uno puede hacer campaña por un partido que lleva adelante actuaciones que atentan contra los valores esenciales de la indentidad del pueblo por los que él ha luchado.
Ley de normatilizació
Hay que recordar que Cristóbal Soler vio nacer la autonomía y participó en el desarrollo de los pilares legislativos de Baleares, como fue en 1986 la Ley de normalización lingüística. Siempre ha recordado la voluntad de consenso de aquellos años y no se ha cansado de repetir en los últimos tiempos que de ningún modo entiende cómo un ejecutivo tiene como objetivo reducir la presencia de la lengua propia en la enseñanza y la función pública.
Era imposible continuar. Soler no quiere ser cómplice de estas políticas y se dice a sí mismo en voz alta que si se mantiene en el partido realmente lo estaría siendo. Es como el dicho aquella de "quien calla otorga". Y Soler no lo quiere hacer.
Mañana lunes Soler ya no será del PP. Deja el partido y se piensa embarcar en los movimientos sociales.