El Estado se endeuda en otros 76.845 millones y desborda las previsiones La cifra asusta. Y pone de relieve las dificultades del Estado para embridar las cuentas públicas.
Grecia marca el camino. Vamos a vivir de lo que nos presten, lo q no estaría mal si se invirtiese en algo que produjese un retorno, pero sólo se invierte en gasto público. Simplemente se está financiando a los mismos estafadores que nos llevaron a la crisis.
Y ese dinero no se distribuye ni cumple con un propósito de inversión para hacer cambios estructurales, sino que va a parar a paraísos fiscales y el que queda va para cuñados, primos, mayordomos, cocineros privados, chóferes y toda una gran lista de profesionales fingidos que se están instalando en las administraciones públicas.
En España se está haciendo lo siguiente.
Véase un barco con brechas en el casco y hundiéndose. El marinero se lo comenta al capitán y le dice que habría que empezar a achicar agua y tapar los agujeros, y luego tratar de evaluar daños y que hacer.
El capitán decide que no, que lo mejor es empezar a tirar carga para realentizar el hundimiento.
Tras un rato y tirar todo lo posible del barco (bidones, sillas, ...), sigue hundiendose, a lo que el capitán decide que hay que empezar a seguir tirando personas, que son otra carga más que hunde el barco.
El final es que se han tirado tantas personas que es imposible hacer cualquier reparación ... la nave se hunde.
¡Hasta cuando vamos a dejar que los políticos hagan con los dineros públicos lo que les viene en gana!. Los criterios sobre en que emplear los dineros que damos al Estado debe ser decidido directamente por los ciudadanos.
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Grecia marca el camino. Vamos a vivir de lo que nos presten, lo q no estaría mal si se invirtiese en algo que produjese un retorno, pero sólo se invierte en gasto público. Simplemente se está financiando a los mismos estafadores que nos llevaron a la crisis.
Y ese dinero no se distribuye ni cumple con un propósito de inversión para hacer cambios estructurales, sino que va a parar a paraísos fiscales y el que queda va para cuñados, primos, mayordomos, cocineros privados, chóferes y toda una gran lista de profesionales fingidos que se están instalando en las administraciones públicas.
¡Más madera!
En España se está haciendo lo siguiente.
Véase un barco con brechas en el casco y hundiéndose. El marinero se lo comenta al capitán y le dice que habría que empezar a achicar agua y tapar los agujeros, y luego tratar de evaluar daños y que hacer.
El capitán decide que no, que lo mejor es empezar a tirar carga para realentizar el hundimiento.
Tras un rato y tirar todo lo posible del barco (bidones, sillas, ...), sigue hundiendose, a lo que el capitán decide que hay que empezar a seguir tirando personas, que son otra carga más que hunde el barco.
El final es que se han tirado tantas personas que es imposible hacer cualquier reparación ... la nave se hunde.
La cuestión es que aún hay idiotas que les votan!
¡Hasta cuando vamos a dejar que los políticos hagan con los dineros públicos lo que les viene en gana!. Los criterios sobre en que emplear los dineros que damos al Estado debe ser decidido directamente por los ciudadanos.
Esperemos que algo cambie en las europeas, si no le diré a todo el mundo TENEMOS LO QUE NOS MERECEMOS