Hace 13 años | Por kirov a politikon.es
Publicado hace 13 años por kirov a politikon.es

Una compañía de seguros, esencialmente, vende protección contra lo improbable. Un accidente de coche o un incendio es algo que no sucede a menudo, pero que tiene consecuencias catastróficas si lo sufrimos y no estamos preparados. Como es básicamente imposible ahorrar suficiente contra cualquier posible desgracia que puede afectarnos, lo que hacemos es contratar una póliza a una aseguradora, y esta hace dinero a base de difuminar riesgos a base de proteger mucha gente.

Comentarios

D

Me parece un buen artículo, aunque no comparto la totalidad de lo expuesto.

Si se consigue asegurar la igualdad de oportunidades de forma efectiva y total, la selva del capitalismo no es tan injusta, pero no por ello deja de ser injusta.

Poder tener lo que me merezca según mi capacidad y esfuerzo es mucho más que igualdad de oportunidades.

Hay que evitar también la explotación, la usurpación de plusvalías y tal.

Incluso con plena igualdad de oportunidades habría personas que sólo podrían tener un empleo de mierda y cobrar mucho menos dinero del que producen.

Porque la ley de la oferta y la demanda puede no ser justa, porque la gente necesita comer para vivir, y necesita dinero para comer, y si alguien tiene que hacer horas extra no remuneradas para que no le echen de su casa y poder seguir manteniendo a su familia las hará, y cobrará menos de lo que dice el convenio, y hará todo lo que haga falta (excepto emplear la violencia física, sólo la violencia económica está bien vista).

El estado, además de una gran aseguradora, es el garante de la justicia, aunque el mercado no tenga ni idea de lo que es la justicia.