Un joven mexicano de 17 años se presenta en el hospital aquejado de dolores muy agudos en los ojos. Cuando los médicos llevan a cabo los análisis no podían creerse lo que estaban viendo. Un inquietante gusano parasitario estaba perforando el iris mientras entraba y salía de los agujeros.
Comentarios
Edito
#2 Y ya se sabe: "Para que lo disfruten los gusanos, mejor que lo coman los humanos".
¿The Strain?.
#1 Eso ha sido lo primero que también he pensado yo al leer el titular.
Un guenfermo entonces.