Hace 13 años | Por davisyo a elpais.com
Publicado hace 13 años por davisyo a elpais.com

Reflexiones del alcalde de Madrid después de haber asistido en Auschwitz a un acto organizado por la Unesco para conmemorar el 66 aniversario de la liberación del campo de concentración nazi

Comentarios

D

Como dijo Sabino Fernández Campo cuando el 23-F... "Ni está ni se le espera".

c

#6 no fue D. Sabino el que dijo eso, me parece que fue la chacha del Armada.

D

#8 "Pasará a la Historia por una frase, un relámpago de intuición en medio de la confusa oscuridad que reinaba en la tarde-noche del 23 de febrero de 1981. Hasta entonces, los golpes de Estado se frenaban con despliegues de tropas, con resistencia armada, con ejercicios de Estado Mayor y con la fuerza más o menos explícita de las armas.

Aquella noche, en la soledad de una Zarzuela sacudida por la preocupación, la zozobra y el aislamiento, el general Sabino Fernández-Campo, secretario general de la Casa del Rey, detuvo un pronunciamiento militar contra la democracia con una sola frase. “Ni está ni se le espera”."

http://www.abc.es/20091026/opinion-firmas/frase-paro-golpe-estado-200910260056.html

et al.

P.D. Lo de "chacha", francamente, sobraba.

c

#10 gracias por sacarme de mi error.

xco

que se lo pregunte al papa.

D

A ser posible no atribuyamos al imbécil de Gallardón citas ajenas.

antroxu

Estaba en España, realizando la cruzada nacional-católica, se ve que estaba demasiado ocupado.

D

En el mismo lugar donde está ahora. No solo en Auschwitz ocurrieron atrocidades, eso pasa todos los dias y tan siquiera sale en los periódicos.
Mejor que nos dediquemos a ser mejores personas y no esperar solo la ayuda divina. No suele funcionar.

sunes

Me parece irrelevante lo que este señor pueda decir acerca de algo tan serio y monstruoso.

D

Perfectamente, #4

D

Cuando estuve en Auschwitz lo que más me impresionó no fue ver el patio donde mataban a latigazos a presos ni las jaulas de poco más de 1 metro donde metían una docena de personas, ni siquiera entrar en las cámaras donde murió gaseada tanta gente, lo que más me impresionó fue ver en un salón, separado por una mampara de cristal, los objetos que traían los judíos al campo de concentración: maletas con el nombre de su dueño, muñecas, peines, zapatos... Esos objetos revivían a sus dueños de manera insoportable.

Debiera ser obligatorio para todos los escolares españoles conocer Auschwitz .