Publicado hace 15 años por --51656-- a elconfidencialdigital.com

En los círculos económicos madrileños se escuchan comentarios sobre el diferente trato que se le ha dado a Fernando Martín (Martinsa-Fadesa) respecto al que se ha aplicado a Rafael Santamaría (Reyal-Urbis). El primero ha sido prácticamente abandonado a su suerte por entidades financieras, políticos y empresarios; no así el segundo. La primera es que Rafael Santamaría tenía arrendadas, desde hace años, unas 16.000 hectáreas en la Sierra de la Culebra y por allí han ido pasando invitados del más alto nivel en la vida política, social a institucio

Comentarios

juvenal
PepeMiaja

Martín tiene exactamente lo que merece: si no hay razón alguna para que el Estado apoye a una constructora cuando le va mal, este tipo, que iba de listo y pensaba que había engañado al dueño de FADESA como a un indio con bolitas de cristal, ha tenido justo lo que merecía.

Y, en todo caso, lo que se dice es que al tal Santamaría lo han apoyado entidades financieras privadas, que no suelen emprender acciones de envergadura para arriesgar su dinero, máxime en los tiempos que corren, si no viesen allí una solvencia de fondo que no encuentran en MARTINSA. Así de sencillo.

A lo mejor es que Martín se queja de que el otro tiene un par de padrinos (ninguno de los cuales me cae bien tampoco, por cierto) y los que crean este pequeño revuelo, dándole la razón, son los suyos, probablemente más numerosos y elitistas.

De modo que el que puede tener caradura en este caso es Fernando Martín. La misma que mostró cuando, al ver el negocio que Jove había hecho a su cuenta al venderle FADESA cuando el tontorrón no se olía el estallido de la burbuja que lo hizo rico, pretendió que la justicia anulase la venta, algo absolutamente injustificado. Poco después se declaró insolvente, como si fuera indigente.

¡Pero es que menúdo cínico, vamos...!