Hace 11 años | Por Masqueperro a yorokobu.es
Publicado hace 11 años por Masqueperro a yorokobu.es

El aspecto monocromático de la Sagrada Familia actual no responde a los deseos iniciales de Gaudí. Entre los planes del arquitecto para su obra magna estaba la de pintar la fachada de diversos colores para dar más fuerza al edificio. Durante los pasados 21, 22 y 23 de septiembre, el deseo del creador catalán se hizo realidad y la iglesia fue invadida por intensos visuales proyectados sobre su ondulada superficie.