Para los amantes de la lectura y los libros su último eructo literario nos resulta plenamente embriagador. Desde el punto de vista de la lectura siempre he agradecido en usted que supiera escribir. Este hecho es cada vez más extraño y si lo aplicamos al mundo de la gastronomía lo es aún más. ¿Especie en peligro de extinción o especie aún por descubrir? Usted cuenta historias, amigo, que es de lo que va la vida. Diferentes pasajes, personajes variopintos, contradicciones humanas y la felicidad simple y llama de comer.
Comentarios
Todo eso está muy bien, si no fuera por la pésima imágen que da una persona con obesidad móbida perorando sobre comida. De la misma manera que se procura poner coto a la delgadez cadavérica de las modelos para evitar malas influencias, no estaría de más cuidar la imágen de los cocineros televisivos.