Varios informes sobre cambio climático han visto la luz estos días, coincidiendo con un verano lleno de fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo. Más del 90% del calentamiento de los últimos 50 años se detecta en aguas marinas, lo que equivale a arrojar al mar la energía necesaria para mantener 500 bombillas de 100W encendidas para cada uno de los habitantes del planeta. El resultado del calentamiento del mar es, como sabemos, la expansión de los océanos y el derretimiento del hielo marino como el del Ártico.
Comentarios
Todos los años en julio-agosto es cuando sacan las noticias sobre el cambio climático para maximizar el efecto alarmista-catastrofista.
Pero bueno, a los que se lo creen no hace falta convencerles, y los que no nos lo creemos, hasta que no nos vengan con pruebas de verdad no nos van a convencer. Así que las campañas estas se las podrían ahorrar.
Errónea.
1) El calentamiento observado es mucho menor en los océanos que en tierra, como sabe cualquiera familiarizado con GISS / HadCRUT / UEA / CSS o en general interesado en saber en qué se basa la ciencia del calentamiento global. La anomalía de temperatura media de los océanos es apenas 0,4ºC por encima de la media del período de referencia, mientras que en tierra es de 0,7ºC.
2) Las proyecciones no se convierten en datos científicos por venir de un científico. Son proyecciones. Ni siquiera llegan a ser predicciones. Valen tanto como las mías. Bueno, valen menos, porque las mías se cumplen y las suyas no.
3) La AEMET predice disminución de lluvias a pesar de que llevan ya 30 años con una tendencia en aumento.
4) Las olas de calor en EEUU/Europa son normales en verano y si tuviesen algo de inusales, serían EL TIEMPO, no EL CLIMA. También hemos tenido severas olas de frío en invierno. Lo único destructivo son los huracanes, y está siendo una temporada bastante normalita al respecto, en la media. Por supuesto, los calentólogos habían augurado una temporada catastrófica, como no podía ser menos. Han vuelto a fallar, para variar.