Hace 14 años | Por Dartacann a publico.es
Publicado hace 14 años por Dartacann a publico.es

La Transición explicada a los españoles: muerto Franco, los políticos de izquierdas y de derechas se reunieron una tarde en un tipi en el bosque, se fumaron unos porros, olvidaron de golpe sus diferencias y anunciaron a la pasmada ciudadanía que España se iba convertir, como por arte de magia, en una democracia... ¿O no? El mito de la transición pacífica gestionada por unos estadistas con dotes sobrenaturales se ha exagerado tanto que cualquier parodia se queda corta y cualquier refutación puede provocar más de un paro cardiaco.

Comentarios

martingerz

No hay que olvidar que una vez que llegó a gobernar el PSOE se olvidó de estas victimas, las arrinconó para no molestar a los poderes fácticos. Por ejemplo en Donostia por iniciativa popular el parque de maría cristina pasó a llamarse Parque de Gladys (por Gladys del Esnal, ecologista asesinada en una marcha antinuclear), bien una vez el PsoE llegó al ayuntamiento y sin avisar volvió a renombrar a ese parque como maria cristina

Muy interesante lo de Público:

Las cifras aportadas por Sánchez Soler hablan por sí solas: entre 1975 y 1983, se produjeron 591 muertes por violencia política (terrorismo de extrema izquierda y extrema derecha, guerra sucia y represión). Nada menos que 188 de los asesinados, los menos investigados, entran dentro de lo que el autor denomina violencia política de origen institucional. "Son los actos desplegados para mantener el orden establecido, los organizados, alentados o instrumentalizados por las instituciones del Estado. Te pongo un ejemplo: al estudiante Arturo Ruiz lo mató en 1977 un miembro de los guerrilleros de Cristo Rey de los que ayudaban a la policía a reprimir las manifestaciones. Es lo que entonces se llamaban grupos de incontrolados", explica.

Los atentados de origen institucional causaron 188 víctimas mortales

Incontrolados, un término nada inocente. "La Audiencia Nacional limitó su alcance político al calificarlos como grupos no adscritos, pese a que eran organizaciones con nombres, siglas y objetivos muy claros: Fuerza Nueva, Falange Española de las Jons o Hermandad de la Guardia de Franco, entre otras. Al contrario, el terrorismo de izquierdas estaba perfectamente catalogado", cuenta.

iramosjan

Esto es un ejemplo de libro de porque, siendo de izquierdas, hay ciertas cosas que no soporto, ciertos tics de la "auténtica" izquierda (si, las comillas son irónicas, por si no se nota).

- Se empieza mezclando churras con merinas. 591 muertos durante la transición, 1975-1983 (curiosa fecha la de terminación, dicho sea de paso...) y después resulta que lo mezcla todo "terrorismo de extrema izquierda y extrema derecha, guerra sucia y represión". Si su objetivo es decir que se alentó una "carnicería" desde el poder, la mayoría de esas muertes no entran en la categoría.

- Se sigue mezclando, en los 188 muertos que sí podrían responder a su objeto declarado, todo vale "actos desplegados para mantener el orden establecido, los organizados, alentados o instrumentalizados por las instituciones del Estado". Toma ya: desde los "organizados" por el poder, a los "instrumentalizados", todos se convierten en "violencia política de origen institucional".

Y de remate, la pura y simple chorrada. "Ya es hora de que nos preguntemos por qué las transiciones a la democracia de, por ejemplo, Portugal y Grecia tuvieron muchas menos víctimas que la española"

Bueno, pues para empezar se me ocurre una razón: que incluso hoy en día Grecia tiene solo 11 millones de habitantes y Portugal, otros tantos. Los dos países, juntos, no llegan a hacer la mitad de España. Y después, en Portugal "solo" hizo falta una larguísima guerra colonial y un golpe de estado militar para acabar con la dictadura, y en Grecia una serie de disturbios y la guerra de civil de Chipre - intervención turca incluida - para que cayeran los coroneles. No sé cuantos fueron los muertos (no estaría de más que el autor nos dijera cuantos cree él que fueron, en Grecia o en Portugal... cosa que, claro, no hace) pero me parece a mí que debieron ser muchos, muchos más que los 188 asesinatos que atribuye al maligno poder establecido en España.

En fin, tengo más años que la mayoría de los meneadores, suficientes para acordarme de los últimos años del franquismo y de la transición, y en general no pensamos nunca que pudiera ser un modelo porque no hubiera ninguna violencia, sino porque tuvo éxito a pesar de esa violencia (con lo que más tendíamos a comparar en aquellos años, por motivos obvios, era con los fracasos de la democracia en Chile y Argentina y los golpes de 1973 y 1976 en esos dos países)