Mª Mercedes García Díaz y Carlos del Río Fernández han querido denunciar la situación que viven los profesores en nuestro país y la facilidad con que puede demolerse el sistema educativo. El artículo explica como con sólo con cuatro pasos se puede desprestigiar a un profesor y muestran un proceso ejemplar que puede servir de modelo para otros centros en el que la falta de respeto hacia el profesor le impide realizar su trabajo y la angustia en su vida diaria le inhabilita para la labor docente.
Comentarios
Estoy muy de acuerdo que si el profesorado no es respetado como profesional, su trabajo es inviable y su vida se convierte en una angustia permanente que los inhabilita para la labor docente.
Creo que si a un profesor se le pudiera echar cuando tiene problemas psíquicos graves, sería mucho más difícil que desacreditaran a los demás.