Las que quieren ascender al cielo, pisar la pasarela de París al parecer tienen que pasar un infierno. Comer antes de un desfile se considera un auténtico pecado. Lo denuncia la exdirectora de Vogue Australia en un libro. Kristin Clemens cuenta el calvario que viven las maniquíes entre bambalinas. Según ella, algunas no prueban bocado, hacen la dieta de las 500 calorías diarias, algunas abusan del deporte, de los laxantes, de las drogas e incluso de inyecciones para acelerar el metabolismo. Para matar el hambre llegan a ingerir papel.
Comentarios
Para matar el hambre llegan a ingerir papel?
Como las cabras
Entre cerdos-as y tontas anda el juego.....
¿Y la tal Kristin Clemens durante cuánto tiempo ha fomentado estas barbaridades?
#1 No se si fomentado pero cuanto tiempo habrá dejado correr para no denunciar estas prácticas
Darwin.
O sea... me entra un amargor.
Sarna con gusto no pica.
En algunas cavernas de Skyrim te encuentras bichos parecidos a los que salen en el vídeo... Joder 500 calorías...