Hace 10 años | Por Froku a vocesdecuenca.com
Publicado hace 10 años por Froku a vocesdecuenca.com

Murcia, Huesca, Santiago, Las Palmas de Gran Canaria y Ponferrada son algunos ejemplos de consistorios que aplican fórmulas especiales ante las quejas de los empleados que tienen su trabajo en áreas de aparcamiento regulado

Comentarios

Katra

Y así es como una medida de restricción de tráfico en favor de los peatones (personas) termina siendo un negocio muy rentable para los ayuntamientos: Nos dividen, nos cobran a todos y nos cierran la boca.
Cómo van a promover la peatonalización si es mucho más rentable cobrar para que todos los coches que puedan pagarlo, sigan restandole espacion a las personas?

Froku

#1 Estoy de acuerdo contigo, pero, por ejemplo en el caso de mi ciudad, a pesar de que somos poquitos habitantes ha tenido un crecimiento urbanístico nefasto que obliga a coger el coche a mucha gente. Porque el sistema de transporte público es lamentable.

D

No entiendo bien esto, o sea, que los trabajadores puedan aparcar delante, o en las cercanías de los establecimientos donde trabajan, y dejar ahí el vehículo aparcado durante todo el horario laboral, ocupando así aparcamientos para que los clientes no encuentren un sitio donde aparcar.

En el pueblo ya casi es imposible aparcar. Yo lo que hago, cuando voy de compras, en lugar de ir al pueblo, voy al LIDL que está en las afueras del pueblo, pero tiene una zona de aparcamiento enorme y gratuita. Luego dirán los de pueblo que no venden a consecuencia de la crisis y tal y cual.

Si yo soy cliente quiero que haya un aparcamiento delante de la tienda que voy a comprar, y si no a mamarla, que te compre tus productos alguien que no le importe gastar zapatos.

Pienso que si tienes una empresa y no dispones de una zona amplia de aparcamientos para tus clientes... estás acabado.

Yo no pago por aparcar en territorio español, no me sale de la polla, antes muerto que pagar por aparcar. En casa no tengo problemas de aparcamiento porque dispongo de un jardín de dos mil metros cuadrados y un chalet con garaje, eso sí, en las afueras del pueblo. Antes muerto que vivir en el centro del pueblo o en una gran ciudad.