De las catacumbas de 1971, he rescatado el todo-en-uno multimedia definitivo: teléfono + calculadora electrónica + minicassette + receptor estereofónico de radio + televisor + sistema de regulación de luz ambiente (WTF!) + lector de microfilm (WTF!!!) + reproductor de videocassette y… ¡diario impreso a domicilio!
Comentarios
Tiene gracia que no se les ocurriera usar una sola pantalla para el vídeo y la tele o que les pareciera inadecuado.
Sin embargo el diseño del mueble y del conjunto no esta nada mal para la época a pesar de su in-eficiencia y tamaño descomunal.