Yo, como autor, renuncio a la percepción de mis pretendidos y supuestos derechos que pueda tener como escritor de libros que estén en las bibliotecas públicas. Me parecería dinero sucio, dinero corrupto, y me niego a eso. Pero también me niego la que mis ingresos queden en un limbo de una entidad de gestión. Yo, como lector, adquiero mi ejemplar en una librería, y también puedo cederlo la quien quiera. La biblioteca, igual que yo, no tiene ánimo de lucro.
Comentarios
La gracia es que no puedes. Es un derecho irrenunciable, no como el derecho al trabajo o a la vivienda.
De todas formas te es igual: no ibas a cobrar un euro. Solo los que tienen muchas ventas cobran algo alguna vez, para que no quede muy mal. Gran parte se lo llevan los editores y las sociedades de gestión.
Para eso estan las licencias libres, como Creative Commons y el registro europeo de SafeCreative.
Igual no puede renunciar, como en el canon o tasa AEDE.