La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha dado luz verde al Gobierno regional para sacrificar e incinerar al medio centenar de vacas y terneros sanos abandonados en la localidad ciudadrealeña de Navalpino, desestimando el recurso planteado por la asociación castellano-manchega Proanimal, que ofrecía diversas alternativas para evitar la muerte de los animales.
Obviamente desde el que momento en que fueron traídas al mundo ya estaban condenadas a muerte, pues su destino era acabar en el matadero. La cuestión de fondo es que no necesitamos comer animales para estar sanos. Lo hacemos por costumbre social y por placer; pero no es una necesidad nutricional. Una alimentación vegana nutricionalmente equilibrada nos aporta todo lo que necesitamos para estar sanos. Así que utilizar de comida a los animales significa infligirles un daño innecesario. Ellos son seres conscientes que, al igual que nosotros, desean vivir y que no les hagan daño.
La jueza ponente es una sicópata sin sentimientos y el consejero Francisco Martínez Arroyo un impresentable. Además la jueza no está interpretando las normas conforme a la realidad social, como le impone el art. 3.1 del Código Civil, así que mejor que se vaya a su puta casa
Pues a mi todo esto me huele a que los animalistas quieren encargarse de las vacas a cambio de cobrar por su manutención. Vamos, lo que se dice chupar de la teta de la administración.
Menudo morro le echa esta gente. El juez decide que se sacrifiquen las vacas y les jode el chollo que se querían montar.
Comentarios
Era mejor que las regalaran a quien las quiera
#1 O sacrificarlas y llevar la carne a comedores escolares y sociales, pero quemarla?
Obviamente desde el que momento en que fueron traídas al mundo ya estaban condenadas a muerte, pues su destino era acabar en el matadero. La cuestión de fondo es que no necesitamos comer animales para estar sanos. Lo hacemos por costumbre social y por placer; pero no es una necesidad nutricional. Una alimentación vegana nutricionalmente equilibrada nos aporta todo lo que necesitamos para estar sanos. Así que utilizar de comida a los animales significa infligirles un daño innecesario. Ellos son seres conscientes que, al igual que nosotros, desean vivir y que no les hagan daño.
La jueza ponente es una sicópata sin sentimientos y el consejero Francisco Martínez Arroyo un impresentable. Además la jueza no está interpretando las normas conforme a la realidad social, como le impone el art. 3.1 del Código Civil, así que mejor que se vaya a su puta casa
Pues a mi todo esto me huele a que los animalistas quieren encargarse de las vacas a cambio de cobrar por su manutención. Vamos, lo que se dice chupar de la teta de la administración.
Menudo morro le echa esta gente. El juez decide que se sacrifiquen las vacas y les jode el chollo que se querían montar.
Lo mismo han estudiado la carrera en la misma universidad que Cifuentes el Máster.
De donde no hay, no se puede sacar.