Hace 12 años | Por yorga a arquehistoria.com
Publicado hace 12 años por yorga a arquehistoria.com

No debe extrañarnos que los antiguos romanos concedieran menos importancia que nosotros al matrimonio. De hecho, una buena parte de la población romana se emparejaba, es decir eran “pareja de hecho” sin llegar a casarse. En la época del Imperio, el matrimonio era un acto estrictamente privado. Se trataba de un sencillo contrato de consenso que no generaba documento alguno ni registro. Sin embargo, este sacramento surtía ciertos efectos jurídicos, puesto que los hijos habidos heredaban del padre nombre y fortuna.