Hace 11 años | Por unjuanma a publico.es
Publicado hace 11 años por unjuanma a publico.es

Cuando en Túnez la gente salió a la calle para echar a Zine El Abidine Ben Alí reclamaban "dignidad", emblema de la Primavera Árabe. Dos años después, mientras se redacta la nueva Constitución, el gobierno islamista de Ennahda persigue los mismos objetivos que su antecesor: ser obediente a las exigencias del FMI, seguir con la aplicación de planes de austeridad y acallar a la disidencia interna mediante la represión policial.

Comentarios

StuartMcNight

Y dale con la manipulación. Oye. Que el FMI no va a nadie a decirle lo que tiene que hacer. Es siempre el otro país el que a pedirle dinero al FMI y entonces este pone sus condiciones.

¿No queremos chantajes del FMI? Pues no le pidamos dinero, ni nosotros ni la "primavera arabe". No puede ser más fácil. Que fácil es siempre echarle la culpa al coco feroz en lugar de a los incompetentes más cercanos.