No todos los hilos de una tela de araña están compuestos por la misma sustancia: las hebras radiales (las que van del centro a los extremos) son pegajosas y, por tanto, son las más peligrosas. En cambio, los hilos que rodean el centro no contienen la sustancia adherente que atrapa a las presas. Así que basta con que la araña no circule por el sitio equivocado. El inconveniente que este sistema presenta es que, al ir a capturar a su presa, ha de tener cuidado.
Comentarios
Porque han pagado derechos de autor.
¿Qué tipo de persona se hace este tipo de preguntas? juju... me encanta el post. Me ha recordado la pregunta: ¿De qué color es un camaleón reflejado en un espejo?
Pues a mi burgaño le gustan los zapateros, pero no las hormigas.
El otro día cogí un zapatero y lo puse en su telaraña y todavía sigue saboreándolo; sin embargo, detesta las hormigas (¿será por el ácido fórmico?).
Hasta donde yo se,una araña no necesita "ir con cuidado" puesto que sabe cual es la tela que pega y la que no,bien por memoria,bien por que la vea o bien porque toca con una pata y nota que se pega.Ahora mismo no lo recuerdo,me hablaron de esto hace tiempo ya jeje,y me parece muy interesante.
Qué interesante esta entrada... siempre pensé que no quedaban atrapadas porque sus patas tenían alguna substancia que las hacía inmunes a su propia telaraña.