La administración Obama incluyó el 12 de mayo al físico Jonathan I. Katz en el comité de cinco científicos “extraordinariamente inteligentes” para controlar el vertido de petróleo en el Golfo de México, pero lo ha despedido tan sólo horas después de ser conocida la virulenta homofobia de Katz.
Tema polémico. A mi los homófobos no me simpatizan en absoluto, pero si es una cuestión totalmente ajena no termino de entender por qué este hombre no puede participar como el resto. El ser homófobo no lo convierte en un mal profesional.
El motivo radica en escritos del científico con títulos como ‘En defensa de la homofoba’, un ensayo plagado de falacias lógicas en el que se define como un “homófobo orgulloso de serlo” y compara a los “sodomitas” con el Ku Klux Klan, acusándolos de querer infectar deliberadamente de “SIDA a pacientes que necesitan transfusiones”.
La propia campaña ha suscitado una cierta controversia, ya que no pocas personas LGTB han opinado que lo más importante es contener la marea negra, por encima de otras consideraciones. Muchos otros, en cambio, han indicado que no se trata de cuestionar el derecho de Katz a ser homófobo, sino de que alguien capaz de anteponer sus convicciones morales a la lógica no sería probablemente la mejor elección para tal puesto.
También se ha señalado que, de haberse proclamado como un orgulloso racista, o antisemita, nunca habría sido seleccionado.
Pues telita con el "intelectual". Y para rematar el último párrafo:
Se da la circunstancia de que Katz también mantiene una opinión muy particular sobre el Calentamiento Global, al considera “probablemente bueno para la Humanidad”. Esto hizo pensar a algunos que su elección podría haberse tratado de un guiño a las petroleras.
No tiene por qué ser mal profesional, dependiendo de a que se dedique (si es psicólogo, si que seria mal profesional) pero en este caso creo que coincide todo.
Se da la circunstancia de que Katz también mantiene una opinión muy particular sobre el Calentamiento Global, al considera “probablemente bueno para la Humanidad”. Esto hizo pensar a algunos que su elección podría haberse tratado de un guiño a las petroleras.
#2, no creo que haya debate posible. Este individuo es un idiota social. La ruina absoluta para un gabinete de crisis como el que nos ocupa, en el que casi tan importante como la competencia técnica de los integrantes, lo son sus habilidades sociales.
El lugar ideal para su eminencia es un frío sótano en Los Álamos, a poder ser alimentado a base de tranchetes por debajo de la puerta.
Creo que lo importante es conseguir a los mejores para que paren esta catastrofe. Que sean homofobos, nazis o comunistas me da exactamente lo mismo. No se trata de un debate político, sino de parar una marea negra.
Luego, que le linchen o lo que sea, pero ahora hay otras prioridades.
P.D: Creo que los ejemplos que he puesto y terminar con marea negra, suena bastante macabro. Pero no era mi intención.
Creo que la prioridad es eliminar la marea negra y reducir lo máximo posible sus consecuencias.
Si ese homófobo puede aportar ideas o soluciones al desastre, no veo porqué no tenerlo en el gabinete de crisis.
En muchas ocasiones, cuando hay desastres, los políticos intentan quedar bien, pero luego la cagan porque no se asesoran como debieran. Tenemos un ejemplo cercano en el tiempo con el Prestige en las costas gallegas.
¿Es mejor contratar a hombres y mujeres correctísimos, de los que nadie pueda hablar o tener gente con capacidad intelectual o científica para resolver los problemas?
Esto es una constante como la velocidad de la luz en el vacío: el grado de homofobia de una persona es directamente proporcional al número de tíos que le gustaría que lo petaran.
Comentarios
Tema polémico. A mi los homófobos no me simpatizan en absoluto, pero si es una cuestión totalmente ajena no termino de entender por qué este hombre no puede participar como el resto. El ser homófobo no lo convierte en un mal profesional.
El motivo radica en escritos del científico con títulos como ‘En defensa de la homofoba’, un ensayo plagado de falacias lógicas en el que se define como un “homófobo orgulloso de serlo” y compara a los “sodomitas” con el Ku Klux Klan, acusándolos de querer infectar deliberadamente de “SIDA a pacientes que necesitan transfusiones”.
La propia campaña ha suscitado una cierta controversia, ya que no pocas personas LGTB han opinado que lo más importante es contener la marea negra, por encima de otras consideraciones. Muchos otros, en cambio, han indicado que no se trata de cuestionar el derecho de Katz a ser homófobo, sino de que alguien capaz de anteponer sus convicciones morales a la lógica no sería probablemente la mejor elección para tal puesto.
También se ha señalado que, de haberse proclamado como un orgulloso racista, o antisemita, nunca habría sido seleccionado.
Pues telita con el "intelectual". Y para rematar el último párrafo:
Se da la circunstancia de que Katz también mantiene una opinión muy particular sobre el Calentamiento Global, al considera “probablemente bueno para la Humanidad”. Esto hizo pensar a algunos que su elección podría haberse tratado de un guiño a las petroleras.
#3
No tiene por qué ser mal profesional, dependiendo de a que se dedique (si es psicólogo, si que seria mal profesional) pero en este caso creo que coincide todo.
Se da la circunstancia de que Katz también mantiene una opinión muy particular sobre el Calentamiento Global, al considera “probablemente bueno para la Humanidad”. Esto hizo pensar a algunos que su elección podría haberse tratado de un guiño a las petroleras.
No tiene desperdicio este elemento.
Caso típico de represaliado político, ¿no?
Flame: ¿La ciencia por encima de la ética o al contrario?
#2, no creo que haya debate posible. Este individuo es un idiota social. La ruina absoluta para un gabinete de crisis como el que nos ocupa, en el que casi tan importante como la competencia técnica de los integrantes, lo son sus habilidades sociales.
El lugar ideal para su eminencia es un frío sótano en Los Álamos, a poder ser alimentado a base de tranchetes por debajo de la puerta.
#8, pues que lo manden a Guantánamo
Creo que lo importante es conseguir a los mejores para que paren esta catastrofe. Que sean homofobos, nazis o comunistas me da exactamente lo mismo. No se trata de un debate político, sino de parar una marea negra.
Luego, que le linchen o lo que sea, pero ahora hay otras prioridades.
P.D: Creo que los ejemplos que he puesto y terminar con marea negra, suena bastante macabro. Pero no era mi intención.
Creo que la prioridad es eliminar la marea negra y reducir lo máximo posible sus consecuencias.
Si ese homófobo puede aportar ideas o soluciones al desastre, no veo porqué no tenerlo en el gabinete de crisis.
En muchas ocasiones, cuando hay desastres, los políticos intentan quedar bien, pero luego la cagan porque no se asesoran como debieran. Tenemos un ejemplo cercano en el tiempo con el Prestige en las costas gallegas.
¿Es mejor contratar a hombres y mujeres correctísimos, de los que nadie pueda hablar o tener gente con capacidad intelectual o científica para resolver los problemas?
Esto es una constante como la velocidad de la luz en el vacío: el grado de homofobia de una persona es directamente proporcional al número de tíos que le gustaría que lo petaran.