Publicado hace 10 años por --383000-- a lauraojea.wordpress.com

Mi querido banco: Cuando comenzamos nuestra relación pensé que iba a ser para siempre. Nuestras primeras citas estaban llenas de ilusión, de cariño, de abrazos, de alegría, de bromas compartidas… Te confíe mis más oscuros secretos: la nómina, los recibos de la luz y de agua, lo que gastaba de teléfono y mis pequeños caprichos. Todo lo que ocultaba ante la gente, estaba abierto para ti. Me dijiste que yo era tu “preferencia“. Me dijiste que yo era especial y que no había nadie como yo para ti. Me mostraste toda tu atención, la mejor de tus...

Comentarios

D

Qué asco. Follarte un banco. Luego los siguientes no se pueden sentar.