1. INDECENTE es que el salario mínimo de un trabajador sea de 624 €/mes y el de un diputado de 3.996 €, pudiendo llegar con dietas y otras prebendas a 6.500 €/mes. 2. INDECENTE es que un catedrático de universidad, un ingeniero o un cirujano de la sanidad pública ganen menos que el concejal de festejos de un ay-untamiento de tercera. 3. INDECENTE es que los políticos se suban sus retribuciones en el porcentaje que les apetezca (siempre por unanimidad, por supuesto, y al inicio de la legislatura).
Comentarios
el problema no es el sueldo oficial de un político, sino el extraoficial. Yo no tengo nada contra aquel que hace bien su trabajo y está bien pagado, sino contra aquel que hace su trabajo al revés.
El Nº 8 dejaría el congreso y el senado vacíos.
Y ahora por favor señores ciudadanos pasen y voten al circo de los monstruos
es una verguenza total.. indecente no es la palabra , corruptocracia es mas certera.