Dadas las circunstancias, parece que la lucha contra la invasión velluda podría ser propia de unos cuantos pognófobos exaltados (pognofobia: persistente, anormal e injustificado miedo a las barbas). ¿Pero y si les digo que nombres tan importantes para la historia como pudieron serlo , , o el zar fueron también simbarbistas, y gobernaron en consecuencia? Les invito a hacer conmigo un repaso de la historia y a conocer a quienes pusieron su granito de arena por conseguir una sociedad afeitada.
Comentarios
Peor que los antibarbistas son los barbistas de temporada. La barba no es moda, la barba es vida.
#1 Yo creo que aunque no venga en la Constitución, se debería votar.
La autora no padece envidia del pene, padece envidia de la barba. Estaban verdes las uvas.
#3 WTF?????????
Barbemos!