Hace 11 días | Por ClaraBernardo a blogs.publico.es
Publicado hace 11 días por ClaraBernardo a blogs.publico.es

La educación pública lleva décadas maltratada por los Gobiernos de la Comunidad de Madrid: recortes, privatizaciones y deterioro de las condiciones de trabajo del profesorado. Se han convocado huelgas y manifestaciones el 8 y 21 de mayo por todos los sindicatos del profesorado y de estudiantes y apoyadas por las asociaciones de familias del alumnado. Desde hace más de una década no se producía tanta unanimidad en las movilizaciones. Los motivos son poderosos y buscan mejorar las condiciones laborales, la calidad de la educación y la defensa de

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Vaya, hoy no pondrán vídeos de YouTube y del “happy learning”? Dios mío pobres niños!

La educación pública lleva décadas sufriendo a los profesionales más jetas y poco motivados del mundo, que solo se sacan la plaza para trabajar menos días que nadie en este país, y los días que van dar la mitad de horas de clase.

Y ahí están los resultados de los informes pisa, para hacer foto de la situación y escarnio de los profesores que pasan de los chavales mientras cobren y no tenga que ir 200 días al año

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Los hechos de la negociación.:

En diciembre, sindicatos y Consejería llegaron al acuerdo de reducir las horas lectivas progresivamente, introducir maestros de apoyo, etc....


En febrero el Consejero se descuelga con un: No hay dinero para la pública y rompe su palabra.

Ante este pisoteo y está falta de consideración ¿Qué se puede hacer?

Y mira que se podrían pedir subidas salariales, que Madrid es de las comunidades donde menos cobran los profesores y más caro es vivir.
Pero solo se pide volver a la situación anterior a los recortes de 2010, siendo Madrid la única que no los ha revertido aún.

Hay que recordar que la enseñanza pública es la única que garantiza la igualdad de oportunidades y trato vengas de donde vengas.
La única donde tus méritos académicos son los únicos que influyen en tus notas.
La única que puede sacar el talento de un alumno y ponerlo a funcionar para la sociedad , sin tener en cuenta el dinero de sus padres

Pero tiene un problema: durante varias décadas la enseñanza pública a servido de ascensor social para jóvenes hijos de obreros que ahora son ingenieros, economistas, abogados, médicos, etc y eso no gusta a aquellos que quieren que solo sus hijos tengan ese privilegio.