#103 Entiendo lo que dices, pero un niño requiere muchos más cuidados que la teta. Hay que lavarlo, vestirlo, cambiarlo, jugar con él... Repartir tareas no implica hacer cada una al 50%, sino que el padre puede hacer unas cosas y la madre otras. Ya he contado en otros comentarios que mi experiencia con la lactancia fue más dura de lo habitual, por lo que mi pareja además se ocupaba de las tareas de la casa.
La teta sí tiene implicaciones a la hora de dormir, que hacen que de noche los cuidados recaigan fundamentalmente en la madre, por lo que estará más cansada.
A nosotros ahí no nos afectó porque tuvimos la suerte de que el niño empezara a dormir del tirón con tres meses y pico, por lo que cuando me reincorporé al trabajo ya ninguno de los dos se tenía que levantar por la noche. En los (muchos) casos en que no es así, entiendo que el biberón ayuda a que descansen más o menos los dos progenitores.
En cuanto a las restricciones alimentarias, lo normal es que un bebé mame con mucha frecuencia los primeros tres o cuatro meses y luego espacie más las tomas, por lo que puedes hacerlo si tienes en cuenta la vida media del alcohol en el cuerpo (por ejemplo, si te tomas una cerveza tienes que esperar dos o tres horas antes de amamantar). Y, si un día te quieres emborrachar, pues te sacas la leche y la tiras.
También desde mi experiencia sacar leche en momentos puntuales es algo llevadero, hacerlo habitualmente es un engorro. Por eso la mayoría de mujeres dejan la lactancia cuando se reincorporan al trabajo. En estos casos, está también la opción (de la que no sé por qué se habla poco) de la lactancia mixta (algunas tomas de pecho y otras de biberón) que es perfectamente factible cuando la LM está establecida (por lo general a partir del tercer mes) y muy apropiada para muchas familias.
#18 No estoy deacuerdo, con ninguno de tus argumentos. No sé cuál es tu experiencia pero a mí me ha enseñado otra cosa.
Básicamente dar teta es más cómodo sólo para el varón ya que vuelcas a la madre toda la responsabilidad de dar leche.
Es cuestión de repartir tareas, tener un bebé requiere mucha dedicación y si, además, te está pidiendo teta cada hora es dedicación exclusiva. Dando biberón a parte de quedar más satisfechos, se reparte la tarea no sólo con la pareja sino a cualquiera que esté disponible y quiera.
Sacar leche tampoco es trivial, requiere también tiempo, que hayas producido la suficiente y con la densidad adecuada. No funciona eso de "tengo 1 hora libre, voy a sacar leche para todo el día".
Luego están las restricciones alimentarias, el que no puedas tomarte ni una cerveza por ejemplo.
Tengo 3 chiquillos criados a biberón desde el primer momento, y compartir los biberones es una experiencia preciosa. Están bien fuertes y sin carencias de ningún tipo.