Hace 11 meses | Por senfet a theguardian.com
Publicado hace 11 meses por senfet a theguardian.com

Silicon Valley quiere hacernos creer que los humanos somos predecibles y nuestras habilidades reemplazables. He aprendido que eso no tiene sentido.

Comentarios

H

#2 Y además tu vida será una peli porno constante lol

Bolgo

#2 Para agachar el lomo y recolectar para el patrón, no hace falta ni estudiar para tener trabajo

Bolgo

#17 En qué basas esa opinión?

Varlak

#19 si ya lo sé, entonces los verdaderos expertos, los máquinas, esos tienen el curro asegurado ¿Qué hacemos con el otro 80 de gente? Es que no estás entendiendo mi pregunta y te estás yendo por detalles anecdóticos.

D

#20 80? Seguro? Los expertos necesitarán a ayudantes, supervisores y gestores.

En el futuro se seguirá programando contra la IA... pero con lenguajes tipo Prolog o Coq.

Laro__

En mi modesta opinión, si eres un buen programador la IA te ayudará a ser mejor aún y más eficiente/productivo. Si eres mediocre me temo que, o te pones las pilas, o lo vas a pasar mal...

D

#14 Los videojuegos artesanales 'homebrew' se venden por una pasta, porque saben del currelo humano que hay detrás.

D

#14 >pero el que hace los menús de restaurante Manolo se va a tomar por culo

Eso pasaba y pasa desde el 99 con el word y programas propios de diseño tipo Scribus. Hasta mi pareja que aborrece la informática se hizo un folleto cuasiprofesional de turismo.

Sobre cartelería con estética abstracta pop-art/bitonal, me dejas 10 minutos con imagemagick, cuatro fotos y te monto 400 carteles diversos de fiestas en bloque con un triste script y varias variables establecidas aleatoriamente.

Varlak

#16 Dedo Luna

D

#18 Repito, muchas de esas cosas que dices eran ya reemplazables por un verdadero usuario medio de informática y no la pamema que cuentan muchos.

Y los programadores van a necesitarse para supervisión si o sí. Y para matemática. Para bioquímica. Para algo que requiera a un verdadero experto detrás que no convierta la maquinaria de una ciudad en un apocalipsis tipo Fukushima.

yonky_numerotrece

#18 Esa ... ecuación, es en Menéame, además de un dogma, también una evidencia de la ingeniería social de autoayuda que solicita lo peor de la "nueva izquierda"..

Bolgo

#16 Seguro que ni uno de esos carteles pasaba por bueno en cuanto hubiera que meter dinero en su producción

D

#22 Te sorprenderías de la supuesta calidad de muchos carteles de fiestas de ciudades medias.

Bolgo

#33 ya, a la altura del jurado de los mismos

d

#14 La IA no es diferente a ninguna revolución tecnológica del pasado y en todas ellas el saldo neto ha sido positivo.

Hablas de la automatización, de los robots. Lo curioso es que en las sociedades con mayor robotización hay menos desempleo y mayor productividad.

Cuando se desarrollaron los sistemas de marcación automática miles de empleos de operadoras que trabajaban pinchando cables para conectar las llamadas telefónicas desaparecieron. En aquella época una llamada telefónica era algo bastante costoso. Pero eso permitió que hoy en día el coste de una llamada sea residual y eso permitio y género una ingente cantidad de puestos de trabajo y de mayores eficiencias en todos los sectores.

Si hubiera habido una Yolanda Díaz para asegurar el puesto de trabajo de las teleoperadoras hoy una llamada seguiría siendo algo bastante serio y eso impactados en caso todos los negocios y en nuestra vida diaria.

rojo_separatista

#25, las sociedades con mayor grado de robotización es donde se trabaja menos. Ten por seguro que se trabaja menos horas en Alemania o Noruega que en Bangla Desh o la República Democrática del Congo. Si esto no va acompañado de políticas que reduzcan el número de horas trabajadas, ten por seguro que será un desastre. Porque el saldo que comentas siempre ha sido negativo. Se trabaja menos hoy que en plena revolución industrial y se trabajará mucho menos dentro de 20 años.

D

#29 También eso va a hacer que surjan nuevos puestos con la imágen, la música y el arte. Y el directo tendrá mucho más valor al ser ejecutado por un humano.

rojo_separatista

#31, no lo pongo en duda, pero el balance no será en ningún caso positivo.

rojo_separatista

#14, pero es que es justo al revés de como lo dice #11. La IA reducirá mucho las diferencias entre la gente brillante y la gente mediocre. Los humanos tenemos pensamiento lineal y tendemos a considerar que los esquemas mentales del pasado aplican al futuro. La disrupción que representa la IA no se entiende del todo y este tipo de comentarios lo ponen de manifiesto.

Varlak

#28 que todo lo que tú quieras, pero va a hacer falta 5 veces menos programadores así que el 80% de programadores mediocres se van a la calle ¿Si o no? Y lo mismo con otras muchas profesiones ¿Si o no?

rojo_separatista

#34, lo que digo yo importa más de lo que crees. Todos estos creciditos que opinan que ellos no van a pringar porque son los más listos de la clase van a pringar igual que todos los demás. Será una buena cura de humildad que quizás ayude a que se pongan las pilas los que quienes todavía van con el chip de "a mí no me va a pillar el tren porque soy más listo que todos vosotros". La competición no será por ver quien es menos mediocre, sino por bien quien malvende peor su fuerza de trabajo.

Varlak

#36 Ok, si es que no quiero discutir sobre el detalle, lo que estoy diciendo es que el sistema actual no puede absorver la cantidad de parados que va a ocasionar la IA, al igual que la revolución industrial llevó a protestas obreras en todo el mundo y que tras décadas de lucha llevaron a las leyes laborales tal y como las conocemos hoy día lo mismo va a pasar con la IA

volandero

#11 El problema es que a cualquier persona que no sea parte de la élite en su profesión, le ponéis la etiqueta de mediocre y ya parece que merece irse al paro.

senfet

Traducción con DeepL:

Cuando perdí mi trabajo, aprendí a programar. Ahora los catastrofistas de la IA intentan asustarme de nuevo

Silicon Valley quiere hacernos creer que los humanos somos predecibles y nuestras habilidades reemplazables. He aprendido que eso no tiene sentido.

Pasé la mayor parte de la década de 2010 trabajando en los nuevos medios de comunicación, lo que -si te gustaba ser despedido repetidamente y luego ser inundado con mensajes burlones incitándote a "aprender a codificar" porque tu industria estaba condenada- era una gran risa. Con el tiempo, la diversión empezó a desaparecer y, en un acto de desafío subversivo (o de resignación cobarde), seguí su consejo, aprendí a programar y cambié a lo que esperaba que fuera una carrera mucho más segura en "desarrollo web", sólo para que los recientes avances en IA supuestamente convirtieran los trabajos de programación en una pérdida de tiempo. Parece que mi cambio profesional ha coincidido accidentalmente con el despliegue masivo de chatbots de inteligencia artificial que también han aprendido a programar y que, en muchos aspectos, ya lo hacen mucho mejor que yo.

El código puede parecer alarmante para los no iniciados: "lenguajes" inescrutables que, en su mayoría, se leen como una calculadora que sufre un ataque, pero, según los evangelistas más fervientes de la IA, ya no tienen por qué representar ninguna barrera. ¿Por qué complicarse la vida con el enrevesado lenguaje de programación necesario para mostrar texto blanco sobre fondo negro, cuando ahora basta con pedirle a un chatbot que lo haga en términos sencillos para que nos muestre el código completo con las instrucciones?

Al jugar con varios chatbots, la IA cometerá bastantes errores (que un buen conocimiento del código ayuda a corregir), pero también puedes hablar con ella e intentará resolverlos por ti. No es difícil imaginar un futuro no muy lejano en el que puedan discernir las necesidades de los usuarios y guiarles a través de las soluciones, y en el que el papel de un desarrollador humano parezca haber pasado a la historia.

Resulta tentador sucumbir al fatalismo que rodea al robo de puestos de trabajo por parte de la IA. Los animadores más ruidosos de la tecnología son los que más ansían cultivarla, animándonos a rendirnos a un nuevo amanecer robótico, en el que dedicar tiempo a aprender habilidades, realizar tareas o saber sobre cualquier cosa puede considerarse algo del pasado. Pero fundamentalmente confunde la capacidad de atajar cómo hacer algo con el desarrollo de una comprensión completa de por qué lo haría.

Los chatbots de IA no han roto ninguna omertà en torno a la codificación. Simplemente han digerido un montón de recursos y materiales de código abierto que ya estaban disponibles gratuitamente en línea para que los seres humanos aprendieran de ellos. Un usuario podría intentar saltarse esta fase aprovechando los conocimientos de un chatbot, pero al hacerlo perdería la oportunidad de comprender qué decisiones está tomando la máquina en su nombre, por qué las está tomando, si son buenas o no y, sobre todo, qué otras cosas son posibles.

senfet

#1 Uno de los aspectos más gratificantes del diseño y el desarrollo web es el pensamiento lateral que implica. Rara vez hay una forma objetiva y única de conseguir algo. Hay que tener en cuenta todos los contextos en los que un usuario se encontrará en un sitio, cómo quieres que interactúe con él, qué quieres provocar en él, si lo que has creado hará que su teléfono se sobrecaliente y explote de inmediato, matándolo al instante, etcétera. Una máquina entrenada para agregar y condensar toda la web en sus formas más predecibles no piensa así, como tampoco lo hace un usuario que dependa de ella.

He tenido la suerte de trabajar en proyectos en los que me han contratado no sólo porque poseo conocimientos de codificación que el cliente no tiene, ni por mis ideas creativas, sino por la combinación de ambas y por cómo se informan mutuamente. Además de haber sido profesionalmente fructífero aprender a programar, también -lamentablemente, dado cómo me intimidaron para que lo hiciera- en realidad... ¿lo disfruto? El subidón que se siente cuando una idea descabellada funciona improbablemente no se parece a nada. Sin ironía, pienso y digo cosas como: "Creo en la capacidad del navegador para ser un medio absurdamente creativo e innovador". Hay proyectos que me empeño en hacer, me paguen o no.

Y aunque la IA puede disminuir ciertos aspectos de mi capacidad para ganar dinero, no voy a tener una opinión tan baja de mi oficio que piense que es esencialmente lo mismo que teclear un comando en un cuadro de chat. Nadie debería hacerlo.

Y, sin embargo, Silicon Valley hace un esfuerzo concertado para hacernos creer que la mente humana es predecible, replicable y poco sofisticada, y que las artes y los sectores adyacentes son reducibles a un conjunto de ecuaciones y palabras clave, porque se han gastado miles de millones en crear máquinas que ahora pueden crear falsificaciones de esfuerzos creativos e imágenes ligeramente divertidas de personajes de Harry Potter vestidos de Balenciaga.

senfet

#3 Preguntado por los posibles casos de uso de la IA, el cofundador de OpenAI (creador de ChatGPT) Greg Brockman hizo una reveladora predicción sobre lo que él veía como el futuro del entretenimiento. "La gente todavía está disgustada por la última temporada de Juego de Tronos, pero imagínate si pudieras pedirle a tu IA que hiciera un nuevo final que fuera por otro camino, y quizás incluso ponerte a ti mismo ahí como protagonista".

La capacidad de la gente para hacer esto ya existe desde tiempos inmemoriales, dentro de sus propias cabezas. El hecho de que los defensores de la IA nos pidan que imaginemos que tenemos imaginación demuestra la escasez de ésta. Estas personas no pueden concebir el placer y la gratificación de crear arte, o por qué alguien preferiría crear sus propias historias en lugar de subcontratar todo el proceso a una máquina. Carecen incluso de la convicción básica en sus propias ideas para idear fanfictions de Juego de Tronos sin pedirle a un ordenador que les haga los deberes.

Los que más salivan en torno al potencial de la IA son los que la ven como una emocionante medida de reducción de costes que podría permitir al capital liberarse por fin de su antiguo adversario, el trabajo. Es un disparate absurdo sugerir que la producción cultural colectiva registrada de la humanidad ha sido esencialmente concluida, embotellada y encorchetada en este punto específico de la historia, que todo era mero forraje y puntos de datos para entrenar modelos de IA que se encargarán a partir de aquí, salud.

Ingerir todas las obras de arte de la historia en una máquina que las reduce sin amor a un resultado medio aproximado no es expresión artística. Puede que sea un truco de salón, una novedad divertida, pero una IA sólo es capaz de producir imitaciones semiconvincentes de nuestras creaciones precisamente porque personas reales y reales tuvieron una vez el pensamiento, la habilidad y la voluntad de crearlas.

El espectro de la IA será utilizado como amenaza y garrote por quienes consideran que la búsqueda creativa sólo tiene valor si se puede monetizar, pero se equivocan. Una máquina no tiene capacidad de autoexpresión, no tiene la obligación de comunicar: esto es lo que yo era, esto es lo que yo sentía y esto es lo que yo representaba. Nosotros sí, y en todos nuestros empeños tenemos que empezar a rechazar los intentos de hacernos olvidar lo valiosa que es realmente nuestra humanidad.

D

Pues que espere, ya veremos cuantos programadores quedan dentro de 10 años.

d

Mirándolo por el lado bueno, al fin habrá camareros para la hostelería.

D

¿esto pasaba en Superman III no?

Cidwel

falta gente poniendo placas solares y arreglando cañerías. Oportunidad de reinventarnos tendremos

D

En el Reino Unido no hay prácticamente desempleo. Nada que ver con España.

Varlak

#7 Hombre, todo el trabajo lo hacen los inmigrantes y cuando no hay curro te vuelves a tu país, nadie vive en Reino Unido si no es para trabajar, te lo digo por experiencia.

e

La historia que conmovió a Spielberg