Se encargan de elegir las flores, coordinar a los invitados y hasta de repartir al arroz a la salida de la Iglesia. Son capaces de organizar desde una boda junto al mar con un cuarteto de cuerda de fondo hasta una sencilla ceremonia civil en un palacete. Buscarán las alianzas perfectas y enseñarán a los novios a bailar el vals. Las hadas madrinas del siglo XXI reciben el nombre de wedding planners, un concepto importado de Estados Unidos, y gracias al cual los novios sólo tienen que imaginar la boda de sus sueños para que la empresa en cuestión
Comentarios
buf, tiene que ser un coñazo todo el planning nupcial. Mis amigos dan fé.
súper interesante
Anda, como la peli de la Anniston