Al que opine que el independentismo ha llegado a la centralidad política gracias también al trabajo de Convergència, le llaman conspiranoico. Octubre de 1990, del documento de trabajo de CIU para «nacionalizar» Catalunya:
#3 Gracias por las referencias. Pero incluso asi no acabo de estar convencido. Ojo, no digo que no sea verdad. Pero si pasara hoy, querriamos almenos ver una foto del original. Además, en el artículo de El Periodico, la entradilla que ponen no dice nada tajante, si no algo asi como "circula este documento, atribuido a las altas esferas". Bien podía haberlo escrito un bromista de la época. Hoy en día lo mandaría por email, pero por aquel entonces hizo fotocopias
Repito, no digo que no sea verdad. Pero a lo mejor Sardà simplemente recuerda haberlo leido en El Pais o El Periódico...
Es muy clarificador este texto. Siempre me ha interesado el estudio de la ideología nacionalista y de como ésta apela, al igual que otras doctrinas como la religión, a los instintos más primarios.Mi pareja prepara una tesis doctoral sobre ciertas cuestiones de la dictadura franquista y en la documentación que maneja se ve cómo las apelaciones a que los puestos clave del Estado español deben ser ocupados por gente "afecta" al régimen, son calcadas a las admoniciones aquí presentadas (en este caso a favor de los afectos a la idea nacionalista catalana). El uso que de la historia que, como arma, se hace por los nacionalismos es calcado en casi todos ellos. Un ejemplo más...
#5 Siempre ha sido así. Y otra cosa que siempre ha sido así es la necesidad que tiene el sujeto pasivo de negar sus influencias para reafirmar su individualidad. El español tiene sus ascendencias y el catalán las suyas. Por eso no entiendo que ciertos corpúsculos independentistas catalanes achaquen a la 'programación anticatalana' ciertos ataques centralistas, mientras aseveran que ellos son nínfulas de espíritu libre que nunca han sido expuestos a ningún tipo de adoctrinamiento. EL adoctrinamiento es el mismo, lo que varía es la nobleza del objetivo a conseguir.
Ambos grupos actúan así porque llevan exactamente el mismo tiempo expuestos a los mismos sistemas propagandísticos yuxtapuestos. Y hablamos de décadas y décadas, no de un panfleto olvidado en el año 1990. Al contarse los años por décadas, el sibilino calado en las mentes de los receptores ya no puede ser distinguido de un acto reflejo. La nación y la nacionalidad, sean cuales fueren, no dejan de ser más que eso: un acto reflejo, un tic, un recuerdo de nuestros miedos ancestrales cuando adorábamos -o fingíamos adorar- al macho alfa para que nos diera una vida más cómoda. La política y la sociedad se apoyan precisamente en esa delegación de responsabilidad; que piensen otros, que yo ya me voy arrimando al ascua que me ponga más calentorro.
SEnD Convertir el Avui en un gran diario de alcance nacional dotándolo de todos los medios necesarios. Actuar de forma parecida con un semanario y con un magazine.
Y sigue vivo, pero no por actividad de lectores precisamente
Otro ejemplo de la sensibilidad primaria que rodea a estas cuestiones es el hecho de votar negativo a la noticia. Yo no votaría negativo a una noticia que habla de la numerosa cantidad de gente en la Diada: simplemente es una descripción de la realidad. Querer negar que algo que va contra mis ideas preconcebidas es simplemente cerrar los ojos a la idea de que puedo estar equivocado: ¿un documento apunta a la posibilidad -como tantas veces ha ocurrido- de que se utilice un sistema educativo público para adoctrinar en una idea de nación? No, eso no puede ser, eso es negativo, mis ideas son mías porque he llegado a ellas como ser maduro y pensante, así que voto negativo, negativo, malo, erróneo. Clase práctica de adoctrinamiento trabajando.
Comentarios
A ver, si no lo dice nadie ya lo digo yo: no digo que no sea verdad, pero podemos ver el documento original?
#1 And Google says: here you go.
No es el documento, pero sí una noticia relacionada en El País en 1990: http://elpais.com/diario/1990/10/28/espana/657068405_850215.html
Copia o extracto del documento, publicado por El Periódico en 1990 (página 2):
http://www.tolerancia.org/updocs/ElPeriodico_Programa2000_CiU_1990.pdf
#3 Gracias por las referencias. Pero incluso asi no acabo de estar convencido. Ojo, no digo que no sea verdad. Pero si pasara hoy, querriamos almenos ver una foto del original. Además, en el artículo de El Periodico, la entradilla que ponen no dice nada tajante, si no algo asi como "circula este documento, atribuido a las altas esferas". Bien podía haberlo escrito un bromista de la época. Hoy en día lo mandaría por email, pero por aquel entonces hizo fotocopias
Repito, no digo que no sea verdad. Pero a lo mejor Sardà simplemente recuerda haberlo leido en El Pais o El Periódico...
Es muy clarificador este texto. Siempre me ha interesado el estudio de la ideología nacionalista y de como ésta apela, al igual que otras doctrinas como la religión, a los instintos más primarios.Mi pareja prepara una tesis doctoral sobre ciertas cuestiones de la dictadura franquista y en la documentación que maneja se ve cómo las apelaciones a que los puestos clave del Estado español deben ser ocupados por gente "afecta" al régimen, son calcadas a las admoniciones aquí presentadas (en este caso a favor de los afectos a la idea nacionalista catalana). El uso que de la historia que, como arma, se hace por los nacionalismos es calcado en casi todos ellos. Un ejemplo más...
#5 Siempre ha sido así. Y otra cosa que siempre ha sido así es la necesidad que tiene el sujeto pasivo de negar sus influencias para reafirmar su individualidad. El español tiene sus ascendencias y el catalán las suyas. Por eso no entiendo que ciertos corpúsculos independentistas catalanes achaquen a la 'programación anticatalana' ciertos ataques centralistas, mientras aseveran que ellos son nínfulas de espíritu libre que nunca han sido expuestos a ningún tipo de adoctrinamiento. EL adoctrinamiento es el mismo, lo que varía es la nobleza del objetivo a conseguir.
Ambos grupos actúan así porque llevan exactamente el mismo tiempo expuestos a los mismos sistemas propagandísticos yuxtapuestos. Y hablamos de décadas y décadas, no de un panfleto olvidado en el año 1990. Al contarse los años por décadas, el sibilino calado en las mentes de los receptores ya no puede ser distinguido de un acto reflejo. La nación y la nacionalidad, sean cuales fueren, no dejan de ser más que eso: un acto reflejo, un tic, un recuerdo de nuestros miedos ancestrales cuando adorábamos -o fingíamos adorar- al macho alfa para que nos diera una vida más cómoda. La política y la sociedad se apoyan precisamente en esa delegación de responsabilidad; que piensen otros, que yo ya me voy arrimando al ascua que me ponga más calentorro.
SEnD Convertir el Avui en un gran diario de alcance nacional dotándolo de todos los medios necesarios. Actuar de forma parecida con un semanario y con un magazine.
Y sigue vivo, pero no por actividad de lectores precisamente
Otro ejemplo de la sensibilidad primaria que rodea a estas cuestiones es el hecho de votar negativo a la noticia. Yo no votaría negativo a una noticia que habla de la numerosa cantidad de gente en la Diada: simplemente es una descripción de la realidad. Querer negar que algo que va contra mis ideas preconcebidas es simplemente cerrar los ojos a la idea de que puedo estar equivocado: ¿un documento apunta a la posibilidad -como tantas veces ha ocurrido- de que se utilice un sistema educativo público para adoctrinar en una idea de nación? No, eso no puede ser, eso es negativo, mis ideas son mías porque he llegado a ellas como ser maduro y pensante, así que voto negativo, negativo, malo, erróneo. Clase práctica de adoctrinamiento trabajando.