El acuerdo sobre la reforma laboral es posible. Al menos así lo cree el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, que esta tarde presidirá la última cita con empresarios y sindicatos. En el caso de que fracasara el Gobierno aprobaría por decreto ley la reforma el 16 de junio. PP y CiU están dispuestos a apoyarla en el Parlamento siempre que tenga contenido, por entender que es fundamental facilitar la salida del paro a los 4,6 millones de trabajadores sin empleo.
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