Hace 6 años | Por --46835-- a blogs.worldbank.org
Publicado hace 6 años por --46835-- a blogs.worldbank.org

Crear más y mejores empleos es fundamental para nuestro trabajo en el Banco Mundial y un objetivo compartido para prácticamente todos los países, pero muchas veces el debate sobre políticas gira en torno al costo y la efectividad de los programas y proyectos para crear empleos. Recientemente en una discusión sobre un proyecto de desarrollo destinado a crear empleo uno de los revisores se opuso dado que el costo por trabajo creado era demasiado alto ¿cuál es el razonamiento detrás de estos números?

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Principalmente los mando por el caso de tecnologías de la información, ver el gráfico.

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Depende si es un trabajo de mierda o es uno digno y con futuro...

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Traduccion:
Crear más y mejores empleos es fundamental para nuestro trabajo en el Banco Mundial y un objetivo compartido para prácticamente todos los países, tanto desarrollados como en desarrollo. Pero muchas veces el debate sobre políticas gira en torno al costo y la efectividad de los programas y proyectos en la creación de empleos.

Como ejemplo, recientemente me encontré en medio de una discusión sobre un proyecto de desarrollo destinado a crear empleo: uno de los revisores se opuso dado que el costo por trabajo creado era demasiado alto. "Más de $ 20,000 por trabajo", dijo, comparándolo con números mucho más bajos (entre $ 500 y $ 3,000 por trabajo) generalmente asociados con programas activos del mercado laboral como capacitación, asistencia para buscar trabajo, subsidios salariales u obras públicas.

Pero, ¿cuál es el razonamiento detrás de estos números?

Contrariamente a un programa de mercado laboral activo (ALMP), que conecta a los trabajadores con trabajos existentes, o con obras públicas que crean trabajos de baja productividad con ganancias inferiores al salario mínimo, el proyecto en cuestión promovía inversiones privadas para crear nuevos empleos en el sector formal .

Crear nuevos trabajos no es barato

Las personas tienden a asociar el costo de un trabajo con los salarios y beneficios pagados a un trabajador. Pero para que ese trabajador pueda hacer algo útil, necesita tener el equipo y, presumiblemente, un lugar donde operar. La empresa que contrate al trabajador probablemente tendrá que comprar un seguro y pagar diferentes tipos de permisos, además de servicios básicos como agua y electricidad. En el margen, agregar un nuevo trabajo cuesta probablemente "solo" el salario, un escritorio y una computadora. Pero para que ese trabajo se creara, una nueva empresa tenía que establecerse en primer lugar, con capital asociado y gastos operacionales.

Tomemos el caso de una cafetería en los Estados Unidos. De acuerdo con Crimson Cup Coffee, establecer una cafetería con asientos puede costar entre $ 80,000 y $ 250,000. Los costos incluyen el alquiler, las reservas de sueldos y beneficios, los honorarios de arquitectos y abogados, el equipo, las materias primas, los impuestos sobre la renta y otros. Una cafetería generalmente emplea entre tres y siete personas, lo que significa que cada trabajo costaría entre $ 25,000 y $ 35,000.

¿Cuántos trabajos pueden crear $ 10 millones?

Para algunos países, mi colega Mohamed Marouani, economista y profesor asociado de la Universidad de la Sorbona, y yo hemos utilizado modelos de equilibrio general para estimar el número de puestos de trabajo que podrían crearse en diferentes sectores de la economía, por un valor de $ 10 millones. inversión.

Al principio nos sorprendimos: las cifras no son tan grandes, solo un par de cientos de empleos directos.

Por ejemplo, en Túnez, al invertir $ 10 millones, podría crear 300 empleos en sectores como el comercio, la madera o la construcción, pero menos de un centenar en el sector eléctrico o de transporte (ver gráfico). Eso es, nuevamente, alrededor de $ 30,000 por trabajo. Estas cifras pueden duplicarse si se cuentan los trabajos indirectos, es decir, aquellos creados debido a la mayor demanda de insumos, bienes y servicios cuando crece un sector específico. Pero los empleos indirectos requieren inversiones propias, por lo que el costo por trabajo no cambia mucho.

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La pregunta fundamental para los políticos que intentan emplear a más personas: ¿cómo uso los recursos públicos limitados?

¿Los asigno a programas activos de mercado de trabajo, o los utilizo para promover la creación de nuevos negocios o la expansión de negocios existentes?

La respuesta, por supuesto, dependerá de la naturaleza del problema. En una economía vibrante que está creando suficientes empleos y donde el problema es simplemente reducir el desempleo friccional al ayudar a los solicitantes de empleo a conectarse con empleos, un gobierno podría estar satisfecho respaldando programas de mercado de trabajo activos más baratos y bien diseñados. Pero cuando el problema es estructural, cuando no hay suficientes empleos, al menos no suficientes empleos de calidad, el gobierno podría no tener otra opción que estimular las inversiones y la creación de empleo. Por lo general, esto implicaría impulsar la demanda agregada o las inversiones dirigidas a sectores específicos.

Por lo tanto, el costo por trabajo puede no ser el indicador adecuado para medir las políticas de creación de empleo, sino más bien la tasa de rendimiento social asociada con la intervención.

En una publicación futura, discutiremos cómo calcular esta tasa de rendimiento (y tomar en cuenta las externalidades sociales de la creación de empleo) en base a nuestra nota sobre el análisis de costo-beneficio de los proyectos de inversión laboral.

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cueta lo que cuesta subir salarios o fabricar mas moneda para que suba el consumo y haya mercado
...Pero el PP C$ y PP$_e NO quieren