El punto de arranque de la teoría crítica, decían los situacionistas, es la insatisfacción. En esa época, los años sesenta, se trataba del malestar de una vida sometida a represión: en la casa, en la escuela, en la fábrica, en el cuartel. Sociedad disciplinaria. ¿Y hoy? El mal de época, sin lugar a dudas, son las crisis de ansiedad y los ataques de pánico. Hablamos de todo ello con Fernando Martín Adúriz, psicoanalista, autor de La ansiedad que no cesa (Xoroi, Barcelona, 2018) y Por qué se escribe. Cincuenta escritores (M. Gómez, Málaga, 2022).
Comentarios
#0 Me ha gustado mucho el artículo, estoy de acuerdo en la mayoría de lo que dice este señor. ME gustaría comentar más, pero no he leído ninguno de sus libros y no quiero cagarla.
Voy a ser breve. Me quedo con el `principio de todo: . Mejor sería rememorar a Sócrates y su expresión en aquel mercado: “¡Cuántas cosas no necesito! .
Y mi opinión personal es que se abusa de los psicofármacos de una manera brutal para paliar síntomas de una enfermedad que no es endógena , la sociedad está infantilizada y confunde la felicidad con el placer, un saludo.
OK Boomer.
psicoanalista
Tol día a pajas.
Pero que manía con la represión.!!!!
Entonces había un tipo de represión política y social agobiante y ahora hay otro tipo de represión social que no sé qué quieres que te diga.