Hace 10 días | Por Hombre_de_Estad... a news.un.org
Publicado hace 10 días por Hombre_de_Estado a news.un.org

281 millones de personas sufrieron hambre aguda en 2023, según el 'Informe Mundial sobre Crisis Alimentarias' (FAO/PMA/UNICEF) divulgado hoy: más de 20% de la población en 59 países la sufrieron. 2023 fue el quinto año consecutivo de avance de la inseguridad alimentaria y alerta del alto riesgo de hambruna y muerte generalizada en Gaza y Sudán. Cita 3 grandes detonadores: conflictos (135 mill.), eventos climáticos extremos (57 mill.) y embates económicos (75 mill.). [Informe: https://www.fsinplatform.org/report/global-report-food-crises-2024/ ]

Comentarios

Kamillerix

Y todo por guerras (proxies)... Basta ya!

B

No sé. A mí lo que me parece es que, si nos atenemos a los altos estándares éticos e intelectuales de Menéame, esta noticia debería ser considerada como aporofóbica, pues al implicar indirectamente que la pobreza es algo malo o negativo, está dejando en mal lugar a todas esas personas, éticas e inteligentes, que, en ejercicio de sus legítimos derechos, consideran que la pobreza y la precariedad son circunstancias estupendas, tan estupendas como para incluso defender como un derecho el poder hacer nacer, y criar, a sus propias proles en ellas.

Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera más clara y evidente (más incluso que meter una papeleta en una urna) en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible?

¿Qué va a ser lo siguiente? ¿Prohibirles a los pobres tener hijos? ¿Y si los pobres desean ejercer libremente su legítimo derecho de elegir considerar que la pobreza y la precariedad son circunstancias estupendas en las que hacer nacer, y criar, a sus proles? ¿Qué vamos a hacer, quitarles ese derecho progenitor educativo constitucional? ¿Vamos a estar supervisando los criterios progenitores educativos de todo el mundo? ¿Vamos a crear una policía de la moral? No podemos ir tomando a la gente por tonta o por malvada.

Y es que el libro de los gustos está en blanco, y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, derechos, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.

A unos puede parecerles que hacer nacer a sus hijos en la pobreza o la precariedad es estupendo, muy ético y muy cultural; a otros puede parecerles que maltratar animales innecesariamente también es estupendo, muy ético y muy cultural; a otros pueden parecerles que atracar bancos, asesinar personas, o la pornografía infantil también son estupendos y muy éticos y culturales; a cada uno de nosotros pueden parecernos que son estupendas y muy éticas y culturales las cosas que sean; a los legisladores pueden parecerles estupendas y muy éticas y culturales las cosas que sean; estamos en un mundo de diversidad ideológica, mutuo respeto y civismo.

Tan respetable es la persona que no quiere hacer nacer a sus hijos en la pobreza porque está mejor no viendo a sus hijos sufrir la pobreza, como la persona que considera estupendo hacer nacer a sus hijos en la pobreza porque elige considerar que la pobreza es estupenda, o porque quiere pensiones o tiene intereses personales que considere más importantes que el bienestar de sus hijos. Que tú o yo consideremos que la pobreza es horrible para los hijos no quita el derecho a otras personas de considerar lo contrario. Si una persona considera que la pobreza es estupenda y quiere que haya más gente en ella y por eso hace nacer a sus hijos en la pobreza, está en su derecho y no es asunto nuestro.

Además, los pobres ya tienen que sufrir la pobreza. Sería inhumano negarles encima el derecho de ver a sus hijos sufriendo también la pobreza.

Así que no permitáis que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestras proles en la pobreza o la precariedad, y entregarlas al capitalismo y a la monarquía. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestras propias proles en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestras proles alcancen la mayoría de edad también se volverán defensoras del derecho de hacer nacer a sus propias proles en la pobreza, en la precariedad, en el capitalismo y en la monarquía, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan todas estas cosas, en forma de pensiones, tanto como vuestras proles os las agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros las agradecéis a vuestros padres, en la misma forma. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestras proles en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo, en el capitalismo y en la monarquía, porque vuestras proles os lo agradecerán, en forma de pensiones.

La cultura es la verdadera riqueza, así que dejad en herencia a vuestras proles la rica cultura de la pobreza.

No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra intergeneracional, o que hay una guerra económica o lucha de clases.

Y recordad que cuando hacéis nacer a vuestras propias proles en la pobreza y la precariedad, no serán los ricos, el capitalismo y la monarquía los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estaréis riendo de ellos.

anv

Bueno... para que algunos tengan mucho más de lo que necesitan otros tienen que tener menos de lo que necesitan.
Nadie, ni siquiera los que se mueren de hambre, quieren igualdad. Todo el mundo sueña con tener más que su vecino aunque el precio a pagar es arriesgarse a tener menos.
¿Por qué la gente juega a la lotería sabiendo que casi siempre pierde? Porque muy poca gente a veces gana y están dispuestos a perder una y otra vez sólo por conservar la esperanza de alguna vez ganar.