Hace 7 años | Por bekobenta a crashoil.blogspot.ie
Publicado hace 7 años por bekobenta a crashoil.blogspot.ie

La cosa parece clara: la mayoría de los trabajadores de los EE.UU. no se están beneficiando de la tan cacareada recuperación económica, sino más bien al contrario: cada vez viven peor, con menos dinero y más penuria, y la amenaza constante de quedarse en el paro. De manera machacona los medios de comunicación repiten las consignas que recogen los puntos de vista de la élite del país, que allí como aquí culpabilizan a los excluidos por su exclusión mientras venden una fantasía según la cual los bravos y decididos "emprenden".

Comentarios

t

"pero lo que les atrae del discurso demagógico del Sr. Trump es la promesa de un futuro mejor; como mínimo, si no porque les dé algo mejor a ellos, porque les promete algo peor para las élites."
Y sin embargo Trump promete bajar aun más los impuestos a las élites.

D

#2 Claro, por eso los medios, celebridades, famosos, escritores, élites intelectuales, etc. lo amaban tanto.

powernergia

#8 ¿Y tu con quien ibas?.
Imagino que con Trump, y encima siendo una mujer la otra candidata...

Vale es una pregunta tonta.

¿A ti te dejan votar?

D

#11 Lo importante aquí es que el otro candidato tenía vagina

#mentalidadprogre

D

#11 Me dejan votan en primarias, no elecciones. Yo iba por Trump, pero no porque Hillary era mujer, sino porque Hillary es corrupta y mentirosa.

D

#2 A las élites no, a las empresas que lleven trabajo, no leas solo los tituláres de quienes se dedican a tirar mierda lol

Grecott

Byung-Chul Han en su libro La sociedad cansada

(Resumen de un profesor de Psicología social en París)

El neoliberalismo ha logrado, mediante el acoso de la publicidad, la idealización del lujo y el consumismo compulsivo, que nos convirtamos en esclavos del trabajo, sometiéndonos por propia voluntad a sus intereses. Que seamos nuestros propios verdugos, matándonos a trabajar, literalmente, y que veamos este estilo de vida, asfixiante, ultra competitivo y enfermizo, como algo natural, deseable y positivo. Al final estamos agotados y deprimidos, sometidos al criterio de una supuesta eficiencia. Se reduce al individuo a mero competidor del otro y la vida a la entrega al trabajo y el rendimiento. Esclavo de si mismo. Explotador de sí mismo, sin tiempo para ser libres, sin tiempo de ocio.


El neoliberalismo “ha tomado nuestras mentes” y nos ha convencido que debemos exigirnos lo imposible para complacer a los mercados y ganar dinero sin descanso, nos ha convencido que debemos dar nuestra vida, entregarla trabajando al nuevo dios del beneficio empresarial. El propio individuo se auto exige trabajar y rendir hasta la enfermedad. El trabajador se convierte en su propio explotador. Mientras, ellos, los que hablan de trabajar sin descanso para encontrar la felicidad, pasan los días practicando golf, leyendo, jugando, paseando al perro, descansando con sus familias o tomando vino al borde de la piscina. Es decir, viviendo. Relajándose. El neoliberalismo es para los incautos, para las masas, que poco o nada entienden de sofisticadas estrategias de manipulación mental e ingeniería social. Ellos prefieren vivir a competir sin descanso. El fin es convencer a las masas que pueden ser felices matándose a trabajar, compitiendo entre ellos hasta lo irracional, cuando el verdadero objetivo es, que generen beneficio a cambio de poco dinero y muchas horas de trabajo. Y lo han conseguido.


El neoliberalismo ha logrado que nos sintamos libres mientras nos explotamos a nosotros mismos. Agotados, estresados. Aislando a cada individuo en la obsesión de sus objetivos materiales, para que las clases medias y bajas no se unan y reivindiquen una vida mas digna, mas tranquila, mas libre, mas lúdica, mas justa, mas humana

Paradisio

Si no estás bien posicionado en la sociedad es por tu culpa. Eres vago o tonto. Y así con esa falsa meritocracia se ocultan los privilegios y robos de la oligarquía. Añádele racismo a la receta, ya estamos peleándonos entre nosotros, y ellos tan panchos.

Socavador

#1 Mal de muchos, consuelo de tontos.

D

¿Se dice colapso social? Me tranquiliza, para mí es el Apocalipsis, el fin de los tiempos, y no soy de ninguna secta ni nada parecido, solo intuitiva.

sotillo

Parece que los bravos y decididos han decidido darle una patada al sistema, lástima que sea la ultraderecha su elección, quizas otros tendrían que examinar el por qué, bueno también pueden seguir discutiendo sin son galgos o podencos

D

#3 Decir ultraderecha me parece simplista. ¿Alguien que quiere acabar con los tratados de libre comercio puede ser llamado ultraderechista?

Trump, creo, no es ni derechista, ni izquierdista. Trump es simplemente Trumpista (o trumpetista).

powernergia

En EEUU, como en España, el supuesto crecimiento oficial, no refleja en absoluto la cruda realidad, y la gente está jodida.

Y nada apunta a que las cosas mejoren.

Grecott

Síndrome Hubris ¿Nos gobiernan dementes?

Hibris se refiere a la violencia ebria de los poderosos hacia los débiles. Los afectados por el 'Hubris' padecen un 'desarrollo paranoide' que afecta a los países que gobiernan.

David Owen y J. Davison ya mostraron en el año 2009 las características que definen a los políticos afectados por el síndrome Hubris:

1- Propensión narcisista a ver su mundo principalmente como un escenario donde ejercitar su poder y buscar la gloria.
2- Predisposición para lanzar acciones que puedan dar a la sociedad una luz favorable, con el fin de embellecer su imagen.
3- Preocupación desmedida por la imagen y la presentación.
4- Modo mesiánico de comentar los asuntos corrientes y una tendencia a la exaltación.
5- Identificación con la nación o una organización hasta el extremo de que el individuo valora su punto de vista y sus intereses como idénticos.
6- Tendencia a hablar de sí mismos en tercera persona o a usar la forma regia de “nosotros”.
7- Excesiva confianza en su propio juicio y desprecio por los consejos o las críticas de los demás.
8- Enfoque personal exagerado, tendente a la omnipotencia, de lo que son capaces de llevar a cabo.
9- Creencia en que antes de rendir cuentas al conjunto de sus colegas o a la opinión pública, la Corte ante la cual deben responder es: la Historia o Dios.
10- Idea inquebrantable de que aquella Corte les absolverá.
11- Pérdida de contacto con la realidad, a menudo vinculada a un aislamiento paulatino.
12- Agitación, imprudencia e impulsividad.
13- Tendencia a privilegiar su amplia visión en detrimento de la entereza moral de un derrotero señalado, de modo a pasar por alto la necesidad de contemplar las posibilidades prácticas, los costos y los resultados.
14- Incompetencia hubrística cuando las cosas van mal porque demasiada confianza en sí mismo condujo al líder a desatender los peligros y las trampas generados por su propia política

Grecott

El beneficio económico es la base de la prosperidad de los países, pero ese beneficio no puede buscarse a cualquier precio. Un país solo puede prosperar si hay bienestar y justicia social. Un estado no puede prosperar sin condiciones laborales dignas. El progreso de un país no puede realizarse al precio de la explotación laboral de sus ciudadanos. Si una sociedad ha de enfermar o morir en condiciones miserables para que otros aumenten sus rentas por encima de lo razonable, entonces no es progreso, es corrupción, es un genocidio encubierto, es esclavitud disfrazada de civismo hipócrita y enfermizo. Un país que construye su prosperidad sobre el sufrimiento de sus ciudadanos, al amparo de leyes indignas que promueven o protegen la injusticia social, no puede llamarse civilizado. Un país civilizado no avanza a costa de la explotación de ninguna de sus capas sociales para que otra capa se enriquezca sin medida. Un país que prospera sobre condiciones laborales indignas, no es un país, es una granja de explotar seres humanos.

R

#5 Joder, es muy bueno, a ver si lo consigo.